Este lunes, en el Día de Reyes, se anticipa un notable descenso en las temperaturas máximas en la mayor parte de España, a excepción de la costa este y los archipiélagos. La Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) ha emitido alertas en 11 comunidades autónomas debido a la inminente llegada de fuertes rachas de viento, lluvias intensas y alto oleaje.

La AEMET resalta la posibilidad de lluvias persistentes y localmente intensas en Galicia y los alrededores de Cádiz, donde se prevén tormentas y, en ocasiones, granizo. También se anticipan acumulaciones significativas de nieve en las zonas montañosas del norte del país.

Zonas en alerta

Los avisos meteorológicos se distribuyen de la siguiente manera: en Andalucía se ha emitido un aviso amarillo por lluvias y oleaje; en Asturias, un aviso naranja por oleaje; mientras que Baleares, Cataluña y Murcia tienen un aviso amarillo por oleaje. Cantabria y el País Vasco cuentan con avisos naranja por oleaje y amarillo por viento; Castilla y León, Navarra y La Rioja tienen un aviso amarillo por viento; y Galicia, un aviso naranja por oleaje.

Según la AEMET, un frente frío cruzará la Península, llevando cielos nublados con precipitaciones que avanzarán de oeste a este, llegando a Baleares en la tarde. Las lluvias serán más intensas en Galicia y Cádiz, donde podrían ser persistentes y localmente fuertes, acompañadas de tormentas. Además, no se descartan chubascos intensos en otras áreas de Andalucía y Menorca hacia el final del día.

Después del paso del frente, se espera que los cielos se despejen de oeste a este, aunque los chubascos continuarán en el norte. Las nevadas se centrarán en las montañas del norte y el sureste, con niveles de nieve descendiendo de 1.400-1.800 metros a 1.000-1.400 metros. En el extremo norte, se esperan acumulaciones significativas de nieve, lo que podría afectar a las actividades en las estaciones de esquí.

¡A prepararse para el frío!

Las temperaturas mínimas también sufrirán un descenso generalizado, siendo más notorio en el norte y noroeste. Sin embargo, en Canarias y alrededor del Mediterráneo, se pronostica un ligero aumento de temperaturas. Las heladas afectarán extensamente a los sistemas montañosos, especialmente en el norte y sureste, con posibilidades de fuertes heladas en los Pirineos.

En Canarias, el frente dejará cielos nublados y chubascos dispersos. La calima, que ha afectado a la región, empezará a disminuir.

Por último, los vientos soplarán del sur y suroeste, cambiando a oeste y noroeste a lo largo de la Península y Baleares, con intervalos de viento fuerte en las zonas costeras. En el Cantábrico se esperan rachas muy fuertes por la mañana, que podrían extenderse al bajo Ebro y el Ampurdán por la tarde. La situación meteorológica sugiere que es un buen día para quedarse en casa, disfrutar de un chocolate caliente y esperar el final de la tormenta.