Arturo Valls revela la frustración familiar tras la derrota del Valencia en la Champions
2024-11-10
Autor: José
Hablar con un valenciano en estos tiempos es una tarea delicada, sobre todo por la conmoción y el dolor que ha causado la reciente DANA en la región. Sin embargo, conversar con Arturo Valls (nacido en 1975 en Valencia) aporta un toque de humor a la situación.
Recuerda con cariño sus inicios en el periodismo deportivo, cuando hacía prácticas en radios locales y se adentraba en la dura realidad de los deportes en su tierra natal. “Con cinco o seis años, me ponía con un palo y una naranja, narrando los partidos que jugaban mis primos”, nos cuenta con una sonrisa, aunque lamenta la actual situación del Valencia, su equipo, que se encuentra en lo más bajo de la tabla.
Con nostalgia rememora la final de la Champions de 2000, cuando el Valencia perdió contra el Real Madrid. A pesar de la tristeza por el resultado, Arturo se sentía emocionado por su labor como periodista. “Recuerdo que lancé las gafas del programa a Raúl y estaba tan enfocado en el reportaje que olvidé que estaba haciendo reír a mi familia, que estaba adolorida por la derrota”, confiesa entre risas. “Mis primos me decían: ‘¿Cómo puedes hacer eso, deberías haberle escupido en las gafas!’”, cuenta Arturo, dejando claro que, a pesar de su rol profesional, la pasión por el fútbol siempre es intensa.
En medio de esta consternación y tristeza, Arturo ha destacado la solidaridad que ha brotado en Valencia ante la adversidad. “Ver a la gente unirse y apoyar a los afectados ha sido increíblemente emotivo”, afirma. Desde la recogida de alimentos hasta donaciones a ONGs como Casa Caridad Valencia, su comunidad ha respondido unida y generosamente. Además, se han organizado subastas benéficas de camisetas de fútbol, uniendo al deporte con la solidaridad.
El presentador también reflexiona sobre cómo el impacto del fútbol se siente de manera personal. “El sufrimiento por mi hijo, que vive en Madrid y tiene que lidiar con la afición del Barça, es grande”, dice. “A veces me sorprendo viéndolo disfrutar de otros equipos, y me pregunto: ‘¿Qué está pasando con mi niño?’”, añade entre risas.
A lo largo de la charla, se siente una mezcla de esperanza y nostalgia. Arturo, quien siempre ha tenido un fuerte sentimiento de valencianismo, no pierde la fe en que el equipo se recuperará. Y mientras se prepara para nuevos proyectos en televisión y cine, sigue disfrutando de cada partido, sin importar los resultados. “[La clave] no es renunciar al fútbol, sino disfrutar del espectáculo”, concluye con una sonrisa.
Desde el sufrimiento hasta la esperanza, Valls representa la lucha y el amor por su equipo, recordándonos que, incluso en los tiempos difíciles, la comunidad y la pasión por el fútbol son más fuertes que cualquier derrota.