¡Gran noticia para los usuarios de Apple! El gigante tecnológico ha decidido desembolsar la impresionante suma de 95 millones de dólares para resolver una demanda colectiva que los acusaba de espiar a sus clientes a través de su famoso asistente de voz, Siri. Este escándalo ha dejado a muchos en estado de sorpresa, ya que se asegura que Apple pudo haber estado recopilando y compartiendo las conversaciones privadas de sus usuarios con terceros durante más de diez años.

Si este acuerdo se aprueba, pondrá fin a un proceso judicial que ha durado cinco años y ha sacudido los cimientos de la reputación de Apple en cuanto a la privacidad y la seguridad de sus consumidores. Se espera que una audiencia se lleve a cabo a mediados de febrero para discutir los términos del acuerdo, y será el juez Jeffrey White quien decidirá si finalmente se otorga el visto bueno.

Pero, ¿quiénes son los afortunados que recibirán parte de estos 95 millones? Según informes de medios estadounidenses, como 'ABC', aunque Apple no admitirá ninguna culpabilidad por sus acciones, millones de usuarios podrán presentar reclamaciones si han utilizado dispositivos con Siri desde el 17 de septiembre de 2014 hasta el 31 de diciembre de 2024. Se estima que cada reclamante podría recibir aproximadamente 20 dólares, dependiendo del número total de participantes en la demanda.

Adicionalmente, el acuerdo plantea que Apple debe eliminar permanentemente todas las grabaciones de audio de Siri colectadas antes de octubre de 2019. También se les exigirá crear una página web que detalle el proceso de cómo los usuarios pueden optar por participar en la opción "Mejorar Siri", buscando mejorar la transparencia sobre el uso de datos.

Las preocupaciones sobre la privacidad se intensificaron al descubrir que Siri podía estar grabando conversaciones privadas incluso cuando no se había activado conscientemente el asistente. Esto significa que, sin que nadie lo supiera, los dispositivos estaban grabando y compartiendo información con anunciantes y otras partes. Algunos afectados han relatado experiencias inquietantes, como recibir anuncios de tratamientos médicos justo después de haber hablado sobre ellos en una consulta con su médico.

La polémica en torno a Siri no es algo nuevo; desde la introducción del comando "Hey Siri", las prácticas de escucha y grabación se convirtieron en el centro de atención. Ahora, se intensifican las interrogantes sobre cómo las empresas tecnológicas manejan la privacidad y la información de sus usuarios. Con la presión de los consumidores y las autoridades, ¿veremos cambios significativos en la forma en que estas empresas operan en el futuro? ¡El tiempo lo dirá!