Antonio Turiel Martínez, un renombrado experto en cambio climático y oceonografía, volvió a cautivar a su audiencia en su reciente charla en enero en la Fundación Sierra Pambley, donde presentó su nuevo libro titulado "El futuro de Europa. Cómo decrecer para una reindustrialización urgente". Con una sólida formación como físico y matemático, su voz se ha convertido en un faro en medio de la creciente crisis ambiental.

En un mundo donde los viajes de largo recorrido son cada vez más complicados por la falta de sostenibilidad, Turiel comenta la injusticia que implica que la comunicación entre ciudades como León y Barcelona dependa de un desvío a través de Madrid. Critica duramente la preferencia que se da a las líneas de alta velocidad en detrimento de los trenes convencionales, abogando por un uso más eficiente y ecológico del ferrocarril español, que permanece infrautilizado.

Sobre su nuevo libro, Turiel argumenta que la primera parte se centra en un diagnóstico crudo, indicando que la situación ambiental no ha mejorado y alertando sobre la próxima burbuja: "La biomasa". Advierte que este fenómeno podría devastar los bosques de León, donde se ensalza la plantación de chopos como una fuente inesgotable de energía. "Este modelo es insostenible. Si dedicáramos todos nuestros cultivos a biocombustibles, aún no cubriríamos un porcentaje significativo del consumo mundial de petróleo", enfatiza.

Un tema crucial que menciona es el impacto del cambio climático en el mar, que ha estado absorbiendo el calor del planeta y, ahora, se muestra incapaz de seguir haciéndolo, generando eventos climáticos extremos. Turiel destaca el caso devastador de la tempestad Daniel en el Mediterráneo que resultó en miles de muertes. Según él, estos cambios son la culminación de un patrón de crecimiento no sustentable y la falta de regulación adecuada que prioriza intereses económicos sobre la vida.

Al hablar sobre las zonas de bajas emisiones, critica cómo las medidas implementadas a menudo perjudican a las clases trabajadoras, quienes ven limitadas sus opciones de movilidad mientras que los privilegiados continúan disfrutando de privilegios a través de vehículos híbridos caros.

Antonio Turiel no se detiene en las críticas: también propone soluciones. Su enfoque sugiere redescubrir tecnologías antiguas que podrían adaptarse a las necesidades actuales de la población, priorizando la producción local y la energía renovable en lugar de modelos extractivistas que sólo benefician a unos pocos.

Finalmente, advierte sobre el peligro que representa un posible regreso de Trump al poder en Estados Unidos, sugiriendo que podría reavivar tensiones globales. Sin embargo, recuerda que, en última instancia, el verdadero reto radica en enfrentar la crisis ambiental, donde la responsabilidad es colectiva y ahora más urgente que nunca. ¡Es hora de abrir los ojos y actuar antes de que sea demasiado tarde!