Ana Peleteiro ha tomado una decisión sorprendente al dejar a su antiguo entrenador, el cubano Iván Pedroso, considerado por muchos como el mejor del mundo en saltos, para unirse a su esposo, Benjamin Compaoré, un exatleta y técnico francés. "Es un loco del triple salto; pocas personas conocen tanto de atletismo como él", afirma la campeona europea.

Peleteiro está lista para comenzar una nueva etapa en su carrera atlética. Después de una rápida mudanza, su preparación tiene lugar en el nuevo módulo de Ribeira, en A Coruña, donde Benjamin planea un programa intensivo para la temporada 2025. Esta temporada será especialmente intensa, con eventos significativos como el Mundial indoor en China, el Europeo en pista cubierta en los Países Bajos y el Mundial al aire libre en septiembre. "Confío mucho en su capacidad de planificación", comenta Peleteiro sobre su marido, quien también ha sido testigo de su proceso de entrenamiento.

Durante los ocho años que Peleteiro estuvo bajo las órdenes de Pedroso, logró grandes éxitos, aunque ha decidido dar este nuevo paso lleno de desafíos. A pesar de las críticas y dudas, Benjamin no es un novato; tiene varios años de experiencia como entrenador desde el INSEP, el centro francés de alto rendimiento. Entre sus atletas, ha contado con nombres reconocidos que han seguido su camino hasta ahora, como la campeona nacional danesa Janne Nielsen y otros destacados atletas franceses.

Compaoré, que ha vestido la camiseta francesa en múltiples competiciones, ha aprendido de los mejores en su disciplina. Bajo la tutela del renombrado Jean-Hervé Stievenart, quien llevó a Benjamin a conseguir la medalla de oro en el campeonato europeo indoor en 2014, se forjó como un competidor formidable. Peleteiro resalta que Benjamin ha amalgamado toda esa experiencia con su propio conocimiento como deportista.

Lo más interesante de esta nueva colaboración es que, a diferencia de muchos deportistas, Benjamin sigue apasionado por el atletismo y disfruta analizando cada salto y cada movimiento. "Te coge un vídeo y te dice a cuántos metros por segundo vas. Para él, esto es un entretenimiento, mientras que para mí a veces resulta agotador", bromea Peleteiro.

Sin embargo, la mayor incógnita que surge de esta transformación es cómo manejarán su relación personal y profesional. A pesar de los temores, ella confía en que sus estilos de entrenamiento son compatibles. "Su modo de entrenar es similar al de Iván Pedroso", indica Peleteiro, quien ya ha compartido sesiones de entrenamiento con Benjamin.

Con una gran motivación y un espíritu competitivo que parece afianzar, Ana Peleteiro está lista para abrazar su nueva aventura. De hecho, aunque oficialmente el cambio de entrenador se anunció recientemente, ya habían comenzado a entrenar juntos durante sus vacaciones en México. Sin duda, su historia es un reflejo del amor y la pasión por el deporte.