Ciencia

¡Alerta Roja! Científicos advierten sobre los peligros del ‘exceso de confianza’ en la captura de CO₂ para combatir el cambio climático

2024-10-09

Autor: Carmen

Un grupo de 30 científicos ha publicado un artículo este miércoles en la prestigiosa revista Nature, advirtiendo sobre los riesgos asociados a superar el límite de calentamiento de 1,5 grados Celsius. Según los expertos, incluso si se logra reducir la temperatura después de un aumento, esto podría ocasionar efectos irreversibles en nuestro planeta, como el acelerado incremento del nivel del mar y daños socioeconómicos profundos, especialmente en las comunidades más vulnerables.

La cifra de 1,5 grados es clave en la lucha contra el cambio climático, establecida en el Acuerdo de París de 2015. Este acuerdo global busca reducir las emisiones de gases de efecto invernadero para que a finales de siglo el aumento de temperatura no sobrepase este umbral en comparación con los niveles preindustriales. Actualmente, el calentamiento ya alcanza aproximadamente 1,2 grados, y las proyecciones indican que, de continuar las tendencias actuales, rebasaremos significativamente esta marca.

El último informe del IPCC, panel de expertos que evalúa la literatura científica sobre el clima bajo la ONU, plantea que existiría una esperanza si se supera 1,5 grados solo temporalmente y se logra retornar a este límite. Para ello, la captura de CO₂, el principal gas de efecto invernadero, es fundamental. Esto se puede lograr mediante la reforestación o tecnologías avanzadas que permitan atrapar el CO₂ de la atmósfera. Sin embargo, los autores de la investigación enfatizan que existe un "exceso de confianza" en estas tecnologías. El científico Carl-Friedrich Schleussner, coordinador del estudio, señala que "revertir el calentamiento requiere la eliminación activa de CO₂ de la atmósfera”.

El artículo menciona al menos cinco áreas donde puede haber una confianza excesiva, incluyendo la disponibilidad real de las soluciones tecnológicas y dudas sobre la capacidad de almacenamiento geológico del carbono extraído. Además, la capacidad natural de recuperar áreas forestales para atrapar y retener CO₂ también está en entredicho debido a los efectos del cambio climático.

Ante este preocupante panorama, Joeri Rogelj, otro de los autores y miembro del Instituto Grantham del Imperial College de Londres, concluye que “solo a través de reducciones ambiciosas de emisiones en el corto plazo podemos reducir de manera más efectiva el riesgo del cambio climático”. Esto implica reducir drásticamente el uso de combustibles fósiles para minimizar la necesidad de eliminar el CO₂ una vez que ha sido emitido.

El estudio también señala los irreversibles efectos de sobrepasar temporalmente los 1,5 grados. Aunque logremos bajar las temperaturas, el mundo no retornará a su estado anterior. La subida del nivel del mar es un claro ejemplo; cualquier aumento dejará un legado irreversible debido al deshielo acumulado de enormes reservas de hielo. Los científicos también discuten la irreversible pérdida de permafrost y turberas, que contribuyen a la emisión de gases como el CO₂ y metano, exacerbando el calentamiento global.

“Los riesgos que enfrenta el mundo tras un rebasamiento son muchos mayores de lo que se reconoce", afirma Rogelj. Por lo tanto, se requieren fuertes compromisos de reducción de emisiones por parte de los países. Este estudio llega justo antes de la cumbre del clima de la ONU, que se llevará a cabo en Bakú, Azerbaiyán. La urgencia de actuar debe reflejarse en las decisiones y acuerdos de este importante encuentro, alentando a los países a dejar atrás los combustibles fósiles, como se hizo en la cumbre de Dubai del año pasado. La reunión de este año debe facilitar que, para 2025, todos los países presenten nuevos planes de recorte de emisiones, acercándonos al objetivo de 1,5 grados.

Aunque los científicos alertan sobre el exceso de confianza en la captura de CO₂, no descartan su uso en situaciones donde evitar emisiones sea complicado. Reconocen que “necesitamos capacidad de eliminación de carbono", pero debe ser "ambientalmente sostenible". Rogelj menciona la reforestación como un ejemplo de almacenamiento natural de CO₂, dado que las plantas absorben este gas. No obstante, advierte que enfocarse exclusivamente en la gestión del carbono puede chocar con otras funciones cruciales de la tierra, como la producción de alimentos y la biodiversidad.

En conclusión, el camino hacia un futuro sostenible y seguro para nuestro planeta pasa por la reducción substancial de emisiones y una evaluación crítica de nuestras soluciones tecnológicas. ¡Es momento de actuar antes de que sea demasiado tarde!