Emergencias ha activado una alarma ante la reactivación de lluvias intensas, y las recomendaciones para prevenir inundaciones han sido claras. El Centro de Coordinación de Emergencias ha emitido un aviso especial instando a todos los municipios y organismos encargados de la gestión de emergencias a estar en alerta y a monitorear las circunstancias adversas de manera continua.

La DANA, o Depresión Aislada en Niveles Altos, podría provocar la crecida incontrolada de ríos y barrancos, lo que promete inundaciones locales en áreas altamente urbanizadas y susceptibles. Por lo tanto, la Conselleria de Justicia e Interior ha solicitado a las autoridades locales que intensifiquen la vigilancia y apliquen los planes de emergencia con anticipación.

Entre las recomendaciones para la población, se insta a los ciudadanos a mantenerse informados sobre la evolución del clima, retirar vehículos de áreas vulnerables, evitar acercarse a las riberas y seguir al pie de la letra las indicaciones de las autoridades. Un consejo vital es no intentar cruzar zonas inundadas o pasos subterráneos, ya que las corrientes pueden ser mortales.

Además, la Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) ha denunciado que el consultorio auxiliar del Grau en Castellón ha sufrido serios daños debido a las lluvias recientes. Goteras, grietas y filtraciones han convertido este espacio en un riesgo para la salud de los trabajadores y pacientes. Desde el sindicato han señalado que la sala de medicinas y los vestuarios se han visto significativamente afectados, y el personal ha tenido que recurrir a cubos y ventiladores para mitigar los daños.

A pesar de que hace meses se comunicaron las necesidades de reparación, las autoridades no han tomado medidas, lo que genera gran preocupación entre los empleados sobre posibles desprendimientos en el techo e inundaciones que pudieran afectar las instalaciones eléctricas. La situación es alarmante, y muchos se preguntan: ¿qué más calamidades nos esperan si no se toman acciones inmediatas? La única certeza es que lo peor podría estar por venir.