Preparación intensa para un duelo legendario

El calor del cemento en la pista de entrenamiento se siente más intenso, mientras Carlos Alcaraz lanza pelotazos al ritmo de su furiosa energía. A su lado, la novia de su hermano observa con diversión: "Lo haces bien, continúa así..." Alcaraz, con una mezcla de seriedad y humor, responde: "Sí, parece que tengo futuro...".

Juan Carlos Ferrero, su entrenador, interviene para ajustar la técnica de su pupilo. "Vamos a entrenar un poco más en el segundo saque de Djokovic, que es crucial en momentos de presión", comenta Ferrero, mientras se preparan para enfrentarse al serbio en las semifinales.

Frente a un gigante del tenis

Ese coloso no es otro que Novak Djokovic, considerado el mejor tenista de todos los tiempos. A pesar de sus 38 años y las dificultades que enfrentó recientemente contra Taylor Fritz, siempre da la sensación de que se necesita un extra de esfuerzo e intensidad.

"Novak es quien es, debemos concentrarnos en lo que hacemos", dice Ferrero, recordando la dolorosa derrota de Alcaraz en Australia, donde Djokovic logró dar la vuelta al partido, afectando mentalmente al joven jugador. "No es venganza, es pura motivación para jugar contra él", añade.

Un juego mental y físico

Ferrero sabe que Djokovic, aunque en descenso, sigue teniendo un instinto competitivo formidable. "Las condiciones van a ser diferentes ahora; el partido será a las tres de la tarde, y eso podría jugar a nuestro favor", explica. El objetivo es claro: hacer que Djokovic sienta la presión física a lo largo del partido.

"Carlos debe llevarlo al límite, que sienta la dureza del juego," sugiere Ferrero, enfatizando la importancia de mantener un ritmo alto. La clave es que Djokovic, a pesar de su experiencia, puede verse obligado a lidiar con el desgaste.

Alcaraz, en su mejor momento

Con una preparación impecable y una concentración notable, Alcaraz de 22 años no ha mostrado flaquezas en sus partidos previos. Ha mantenido el control y ha refinado su servicio, registrando impresionantes estadísticas de aciertos y efectividad.

"Hemos trabajado en que su brazo y su mano estén más sueltos", dice Ferrero, y los números hablan por sí mismos: un promedio de 6 aces, un 64% de efectividad en el primer saque y una impresionante tasa de retención en sus juegos de servicio. Este Alcaraz está listo para el desafío, y la expectativa es alta.

La amenaza de Djokovic

Aún así, Ferrero no subestima a Djokovic: "Es un jugador que siempre tiene recursos para revertir situaciones desfavorables. Necesitamos ser inteligentes en la cancha y aprovechar cada oportunidad".

A medida que se acerca el gran partido, la pregunta que todos se hacen es: ¿podrá Alcaraz derribar al mito Djokovic y dar un paso más hacia la gloria? La respuesta se revelará en la pista.