Los Talibanes Responden a Trump

El régimen talibán ha lanzado una fuerte advertencia a Estados Unidos para que evite repetir "errores del pasado", coincidiendo con las recientes declaraciones del expresidente Donald Trump, quien ha manifestado su deseo de recuperar la base aérea de Bagram, actualmente bajo control talibán desde 2021.

Compromisos en el Acuerdo de Doha

A través de un comunicado oficial, el Emirato Islámico de Afganistán dejó claro que "la independencia y la integridad territorial de Afganistán son prioridades absolutas". Instaron a Washington a evitar cualquier intento de reincidir en "experiencias fallidas". El comunicado también recalca que, según el Acuerdo de Doha, Estados Unidos se comprometió a no amenazar con el uso de la fuerza contra la soberanía afgana.

La Furia de Trump y sus Consecuencias

La respuesta del gobierno afgano se produjo tras el mensaje de Trump en su plataforma Truth Social, donde exigió la devolución de la base de Bagram, ubicada a 60 kilómetros al noroeste de Kabul. El exmandatario advirtió sobre posibles represalias si su demanda no era atendida: "¡Si Afganistán no devuelve la base a quienes la construyeron, los Estados Unidos de América, PASARÁN COSAS MALAS!".

Relaciones Económicas Sin Presencia Militar

Zakir Jalaly, un alto cargo talibán, ya había respondido a las declaraciones de Trump, expresando que Afganistán está dispuesto a mantener relaciones económicas y políticas con Estados Unidos, pero rechazando de plano cualquier presencia militar estadounidense en su territorio. "Podemos establecer relaciones basadas en el respeto mutuo y los intereses compartidos, sin necesidad de tropas en Afganistán", afirmó Jalaly.

La Historia de la Base de Bagram

A pesar de que Trump señala a Estados Unidos como constructor de la base, la realidad es que fue erigida en la década de 1950 por la Unión Soviética, que la utilizó como centro estratégico durante su invasión en los años ochenta. Tras la retirada soviética y el estallido de la guerra civil, Estados Unidos tomó control de Bagram en 2001, convirtiéndola en la pieza central de su presencia militar en Afganistán durante 20 años.

Reflexiones Finales

A medida que las tensiones aumentan entre los talibanes y la administración estadounidense, queda claro que las relaciones futuras dependen no solo de las decisiones políticas, sino también de la comprensión histórica y el respeto mutuo.