La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, hizo un llamamiento urgente el pasado martes (11 de marzo de 2025) para potenciar las capacidades defensivas de la Unión Europea. En un discurso contundente ante el Parlamento Europeo, enfatizó que Europa ha estado convenciéndose de que disfrutaba de épocas de paz, pero en realidad, estaba enfrentando un alarmante déficit de seguridad.

"El tiempo de las ilusiones ha terminado. Ahora, Europa debe hacerse cargo de su propia defensa, no en un futuro lejano, sino hoy mismo", afirmó con firmeza la funcionaria alemana. Este mensaje subraya la necesidad inminente de reforzar la defensa europea, una medida que Von der Leyen consideró esencial y urgente.

Durante años, el bloque europeo ha creído erróneamente que podía confiar de manera indefinida en la protección total de Estados Unidos. "Esa percepción de seguridad nos llevó a bajar la guardia", agregó. La situación actual refleja cómo el orden de seguridad en Europa está "siendo sacudido", y muchas de "nuestras ilusiones se desmoronan", afirmó Von der Leyen.

Recordando los eventos del pasado, recordó que tras la Guerra Fría, algunos pensaron que Rusia podría integrarse plenamente en la arquitectura de seguridad y economía de Europa. Sin embargo, los acontecimientos recientes han demostrado que esa creencia fue un error.

En un esfuerzo por revertir esta tendencia, la semana pasada la Comisión Europea lanzó una ambiciosa propuesta para aumentar las inversiones en defensa y seguridad. Von der Leyen destacó que este plan podría movilizar hasta 800 mil millones de euros, aunque aún no se ha establecido un cronograma específico para su implementación.

La propuesta incluye una flexibilización de las estrictas normas fiscales del bloque, lo que permitiría a los países miembros realizar inversiones más significativas en el área de la defensa. Esta medida es crucial para asegurar que Europa esté mejor preparada frente a las amenazas emergentes, no solo desde el este, sino también desde el sur, en un contexto donde el terrorismo y la inestabilidad regional siguen siendo desafíos persistentes.

Así, Ursula von der Leyen ha lanzado un claro mensaje: la seguridad de Europa en el siglo XXI depende de su capacidad de defenderse a sí misma. ¿Está Europa lista para aceptar este desafío? La respuesta podría definir el futuro del continente.