El Ayuntamiento de Villaviciosa ha lanzado con gran éxito la segunda edición de la "Psicoasesoría Joven", un innovador programa destinado a brindar apoyo y bienestar emocional a jóvenes y adolescentes del concejo. Este servicio se pone en marcha en respuesta a las alarmantes necesidades de salud mental que surgieron tras la pandemia, buscando acompañar a los adolescentes en su día a día y ayudarles a gestionar conflictos, emociones y cambios típicos de esta etapa crucial de la vida.

Violeta Fernández, concejala de Juventud, y María Pérez, psicóloga de la Asociación Ye Too Ponese, presentaron este valioso programa, que está disponible de forma gratuita gracias a la financiación municipal. Pero, ¡atención! ¡Has oído bien! Este recurso no solo ofrece terapia; busca empoderar a los jóvenes para enfrentar los desafíos que están experimentando en un mundo tan cambiante.

El proyecto, que nació hace aproximadamente un año tras una encuesta reveladora entre los jóvenes de Villaviciosa, demostró la falta de recursos emocionales tras la crisis sanitaria. En su primer año, la iniciativa fue un éxito rotundo, atendiendo a cerca de una veintena de adolescentes entre 13 y 15 años. Ahora, después de un pequeño descanso veraniego, el servicio está listo para retomar su actividad con la ambición de llegar a más chicos y chicas. "La adolescencia está llena de dificultades y transformaciones. Con la psicoasesoría, buscamos ofrecer un espacio seguro donde los jóvenes puedan aprender a manejar sus emociones de manera saludable", señala María Pérez.

El programa consta de dos sesiones quincenales que pueden ser individuales o grupales, ajustándose a las necesidades de cada usuario. Cada sesión, de 30 a 40 minutos, se centra en situaciones específicas que los jóvenes pueden estar enfrentando. "Realizamos una evaluación inicial para identificar las necesidades de cada persona y trabajar con herramientas dinámicas que les ayuden a resolver problemas. Por ejemplo, si un chico tiene dificultades para socializar en el instituto, podemos explorar técnicas de comunicación y estrategias para aumentar su autoconfianza", explica la psicóloga.

Un aspecto clave es su colaboración con los centros educativos locales y el centro de salud, lo que garantiza que se puedan detectar y derivar casos rápidamente. Fernández subraya que la psicoasesoría no es solo un recurso individual, sino una herramienta de transformación social: "Queremos que sea un apoyo efectivo para toda la comunidad. Si hay problemas detectables en las escuelas o en el centro de salud, los profesionales pueden remitir a los jóvenes hacia este servicio, involucrando a sus familias en el proceso de mejora. Esto crea un entorno más saludable para los jóvenes y sus seres queridos."

Además, el programa reconoce que la adolescencia también representa un cambio significativo para los padres. María Pérez enfatiza la necesidad de involucrar a las familias en el proceso, ayudándolas a entender cómo apoyar a sus hijos en esta transición hacia la adultez. "La adolescencia puede ser un reto tanto para los jóvenes como para los padres. Acompañar a sus hijos en este momento implica cuestionar muchas ideas sobre límites y autonomía y brindarles el apoyo que necesitan", añade Pérez. La "Psicoasesoría Joven" ofrece recursos y un espacio de reflexión para las familias, fomentando la comunicación y la comprensión mutua.

En la primera edición, muchos usuarios encontraron en la psicoasesoría un complemento útil a otros tratamientos de salud mental, como la terapia psicológica. "Algunos jóvenes que ya recibían tratamiento con profesionales encontraban aquí un apoyo adicional. En esta etapa, donde las relaciones y emociones son especialmente complejas, este servicio busca ser una ayuda fundamental", comenta Pérez.

Uno de los logros más destacados es la progresiva normalización de la conversación sobre salud mental entre adolescentes y sus familias. "Hoy en día, los jóvenes y sus padres son mucho más propensos a hablar abiertamente sobre estos temas. La salud mental ya no se percibe como un tabú, sino como una parte vital de nuestros vidas. Ofrecer a los adolescentes un espacio de escucha y acompañamiento es crucial en un periodo tan complicado como la adolescencia", afirma la psicóloga.

Con esta segunda edición de la "Psicoasesoría Joven", el Ayuntamiento de Villaviciosa reafirma su compromiso inquebrantable con la salud mental y el bienestar de las generaciones futuras, asegurando que todos los jóvenes cuenten con un recurso cercano y accesible para sentirse apoyados en su desarrollo. ¡Una iniciativa realmente digna de aplauso que podría revolucionar el enfoque de la salud mental en las comunidades! ¿Quién dice que hablar de emociones es un signo de debilidad? En Villaviciosa, ¡es una señal de fuerza!