La Facultad de Medicina de la Universidad de Chile está celebrando un momento extraordinario: la graduación de la primera cohorte de especialistas en “Nutrición Clínica del Adulto”. Este nuevo programa, impulsado por el Departamento de Cirugía del Hospital Clínico de la Universidad de Chile (HCUCH), representa un avance significativo en el sector de la salud en el país, abordando los desafíos de la salud nutricional en adultos.

Bajo la dirección de la doctora Karin Papapietro Vallejo, la especialidad ha sido desarrollada con experiencias y conocimientos de destacados académicos como Fernando Carrasco y Pamela Rojas, quienes junto a un equipo multidisciplinario han formado a las primeras especialistas en este nuevo campo: las doctoras Maurietch Manríquez Figueroa y Patricia Latorre Gómez.

El doctor Fernando Carrasco, miembro del comité académico, destacó la importancia de este logro: “Hemos trabajado arduamente durante décadas para consolidar esta especialidad. Antes, la nutrición clínica en adultos se abordaba de manera empírica, pero hoy contamos con una formación formal, estructurada y respaldada por la Universidad y el Ministerio de Salud”.

Se ha hecho evidente la necesidad de un programa especializado debido al incremento de enfermedades crónicas y nutricionales que afectan a la población adulta, incluyendo la obesidad, diabetes y desnutrición. El profesor Carrasco subrayó: “Este programa capacita médicos en una sólida base clínica, equipándolos para diagnosticar y tratar patologías de nutrición y mejorar la salud integral de los pacientes”.

El currículo del programa incluye materias vitales tales como: Nutrición General; Evaluación del Estado Nutricional; Enfermedades Nutricionales y Metabólicas del Adulto; Bases Moleculares de la Obesidad; e Intervenciones Alimentarias Nutricionales, todas esenciales para la preparación de estos nuevos especialistas.

El proceso para obtener el reconocimiento de esta especialidad no fue sencillo. “Nos tomó años convencer a las autoridades sobre su importancia. Sabíamos que requería una estructura acorde a otras áreas médicas, con formación que incluyera rotaciones clínicas”, explicó Carrasco. Antes de este programa, los interesados solo podían acceder a un Magíster en Nutrición, que carecía de la profundidad práctica y clínica que hoy se garantiza.

Este reconocimiento formal no solo beneficia a los médicos que buscan especializarse, sino que también mejora la calidad de atención para los pacientes. Se ha logrado una inclusión de la especialidad en el Reglamento de Certificación del Ministerio de Salud, un hito que permitirá a los egresados figurar oficialmente como especialistas: “Esto asegura al pacientes tratamientos precisos basados en evidencia científica”, afirmó Carrasco.

A medida que el programa evoluciona, su impacto se siente en todo el sistema de salud. La celebración de esta primera cohorte marca solo el comienzo de un futuro prometedor para la Facultad de Medicina y el Departamento de Nutrición. Se espera que continúen su compromiso en la formación de especialistas en nutrición clínica, contribuyendo de manera significativa al bienestar y salud de los ciudadanos a lo largo del país. Este avance es fundamental en un contexto donde la salud integral y la prevención son más importantes que nunca en la lucha contra las crecientes epidemias de enfermedades nutricionales.