La noche de este lunes, Peñaflor se convirtió en escenario de una tragedia inesperada tras un tiroteo que culminó con la muerte de un niño de apenas 11 años. El pequeño, quien solo era un espectador, presenció el incidente desde las gradas de una multicancha en La Pradera, donde unas 20 personas se reunían para disfrutar de un partido de fútbol entre vecinos y un equipo visitante de Maipú.

El caos comenzó cerca de las 23:00 horas, cuando dos jugadores se enzarzaron en una discusión. De acuerdo a varios testigos, uno de los implicados sacó un arma de fuego de un vehículo y disparó en múltiple ocasiones, alcanzando a varios presentes. "No se trató de un enfrentamiento, fue un ataque indiscriminado", relató uno de los asistentes, quien también expresó su indignación por la falta de respuesta rápida de Carabineros.

El niño, quien recibió tres impactos de bala, fue rápidamente trasladado a un centro asistencial, donde lamentablemente falleció. Su abuelo, visiblemente afectado, compartió que el menor era un apasionado por el deporte y que el fútbol era su mayor entretenimiento.

Tras la noticia, los vecinos adornaron el lugar con globos blancos y velas como una forma de homenaje. El ambiente de la comunidad, antes festivo, se tornó en un manto de dolor y rabia ante lo ocurrido. Muchos expresaron su preocupación sobre la creciente violencia en el barrio y clamaron por más seguridad.

El presunto autor de los disparos ha sido identificado como Johan, un joven de 18 años que se mudó a la zona hace un año. Pese a las denuncias, hasta el momento no ha sido aprehendido. La Fiscalía, liderada por la Fiscal Yasne Pastén, está en plena investigación y ha indicadio que hay evidencias de que más de una persona podría estar involucrada.

Por su parte, el alcalde de Peñaflor, Rodrigo Cornejo, transmitió sus condolencias a la familia del niño, asegurando que este hecho es un llamado urgente a reflexionar sobre la violencia en los barrios. Añadió que se están buscando soluciones inmediatas y que las autoridades deben redoblar esfuerzos para mejorar la seguridad.

En respuesta al incidente, el Gobierno ha anunciado su intención de presentar una querella y ha comprometido mejorar la presencia policial en la región. Esto se suma a la urgencia de activar una subcomisaría cercana al lugar del crimen, la cual aún no opera. El delegado presidencial metropolitano, Gonzalo Durán, afirmó que se apoyará a la familia afectada a través del Centro de Apoyo a Víctimas de Delitos, mostrando así la determinación del Gobierno para abordar esta triste realidad.