Una desgarradora tragedia se ha desatado en Cerrillos, región Metropolitana, donde un funcionario activo de la Policía de Investigaciones (PDI) disparó y mató a su propio hijo de dos años antes de quitarse la vida con la misma arma.

El inquietante suceso ocurrió en un departamento del Condominio Portal Oeste X, en la intersección de las calles Bombero Hugo Olguín y Avenida Fernández Albano. Este trágico evento ha dejado a la comunidad en estado de shock.

El fiscal jefe de flagrancia de la Fiscalía Occidente, Patricio Rosas, ha informado que la Brigada de Homicidios de la PDI está liderando la investigación del delito, que es tratado como un parricidio consumado. En declaraciones iniciales, Rosas mencionó que el oficial disparó contra su hijo y luego intentó suicidarse, aunque primero no había fallecido. Sin embargo, poco después se confirmó su muerte.

Lo impactante de esta historia es que la madre del pequeño, también funcionaria activa de la PDI, estuvo presente durante el incidente. Según el fiscal, ella no sufrió heridas de bala, pero está siendo atendida médicamente debido a un estado de profundo shock emocional.

Hasta ahora, las investigaciones revelan que no existen antecedentes previos de violencia intrafamiliar entre los miembros de esta familia, lo que ha dejado a muchos preguntándose qué pudo llevar a este trágico desenlace.

Además, se han iniciado una serie de diligencias para acceder a la historia clínica del funcionario, incluidas sus condiciones de salud mental, para entender mejor las razones detrás de este acto tan violento. Se ha solicitado que los equipos forenses analicen la pistola utilizada en el crimen para verificar si pertenece al armamento institucional de la PDI o es un arma particular.

La situación ha suscitado un debate sobre la salud mental de los funcionarios policiales, ya que muchos se preguntan si hay el apoyo necesario para manejar el estrés y las presiones del trabajo en la fuerza pública. Expertos en salud mental han sugerido que es vital implementar estrategias de apoyo psicológico más sólidas para evitar que eventos tan trágicos sucedan en el futuro.

Las identidades de los involucrados continúan en reserva por parte del Ministerio Público, mientras la comunidad lamenta la pérdida de una vida tan joven en circunstancias tan horrendas.