Un Hallazgo Inesperado

Enrico Tosti-Croce, un ingeniero electrónico de 77 años originario de Génova, tuvo una revelación impactante cuando escuchó en la radio que Grecia estaba reclamando las estatuas robadas del Partenón. Recordó que en el comedor de su casa en Viña del Mar, Chile, tenía un pequeño fragmento de mármol del famoso templo, traído por su padre en los años 30.

Un Legado Familiar Olvidado

Este trozo de mármol adornó su hogar por décadas, pero Enrico nunca se imaginó su verdadero valor. Cuando sus padres fallecieron, lo heredó sin pensar en su procedencia histórica. Guardado como un simple objeto decorativo, su historia cambió cuando decidió que era momento de devolverlo al país que le dio vida: Grecia.

El Contacto con la Embajada

El 6 de enero, Enrico se atrevió a escribir a la embajada griega en Chile, alegando poseer un fragmento del Partenón. Después de algunas gestiones, la embajada mostró interés, y Enrico se preparó para llevar la pieza a Santiago, donde sería evaluada por expertos.

Un Regalito del Pasado

Finalmente, la pieza fue identificada como parte de la canaleta del Hecatompedón, un templo arcaico de la Acrópolis, y no del Partenón como él inicialmente pensó. Este templo fue destruido por los persas, y su fragmento, una pieza de historia que había estado perdida, fue agradecido oficialmente por las autoridades griegas.

Devolución con Estilo

El 4 de noviembre, Enrico será homenajeado durante un concierto en el Teatro de Carabineros, celebrando su acto de honor y valentía. Su historia ha resonado profundamente, y sus hermanos bromean, sugiriendo que se ha vuelto famoso de la noche a la mañana.

Una Inspiración Internacional

El gesto de Tosti-Croce ha inspirado a muchos, y Theos, de la embajada griega, subraya la importancia de acciones como esta. Enrico ha demostrado que nunca es tarde para hacer lo correcto, y su historia podría servir como ejemplo para otros ciudadanos en Chile y en todo el mundo.