En un giro inesperado que dejó a los fanáticos boquiabiertos, Novak Djokovic (7° ATP) se retiró en las semifinales del Australian Open 2025 después de jugar solo un set, en el que Alexander Zverev (2°) se llevó la victoria por 7-6(5).

La leyenda serbia, diez veces campeón en Melbourne, no pudo sobreponerse a la lesión que sufrió al final del primer set durante su intensa victoria ante el español Carlos Alcaraz (3) en los cuartos de final. Consciente de que no podía continuar en el torneo, Djokovic tomó la inesperada decisión de abandonar la pista después de un comienzo prometedor.

Durante el primer set, Zverev mostró su calidad al aprovechar un error inusual de Djokovic, quien falló una volea sencilla en el primer punto del set. Visiblemente afectado, Djokovic se acercó a la red para felicitar a Zverev y notificó tanto a él como al juez de silla que se retiraba del encuentro.

La reacción del público en el Rod Laver Arena fue inmediata: comenzaron a pifiar fuertemente a Djokovic, generando un ambiente tenso. Sin embargo, Zverev no dudó en defender a su rival: "Por favor, no abucheen a un jugador cuando se retira lesionado. Todos han pagado por un gran espectáculo, pero deben darle el respeto que merece Novak. Ha dado su vida al tenis y ha competido incluso con lesiones", expresó Zverev.

En esta apasionante semifinal, Zverev resaltó su respeto por Djokovic, mencionando que siempre ha sido uno de sus mejores amigos en el circuito: "Siempre que necesito un consejo, puedo llamarlo. Esperaba un duro partido y aunque solo jugamos un set, fue de mucha calidad. Solo tengo respeto por él".

Este incidente también abre el debate sobre la salud de los jugadores de élite y la importancia de cuidar la integridad física en competiciones de gran nivel. Los fanáticos quedan a la espera de la evolución de Djokovic y su posible regreso a las canchas, mientras que Zverev se prepara para su tercera final de Grand Slam.