La magia de la risa en tiempos difíciles

Las enfermedades y la hospitalización impactan profundamente en el bienestar emocional de los más pequeños. Con el fin de aliviar la ansiedad y el estrés que afrontan durante su tratamiento, Payasospital ha lanzado una iniciativa que ilumina las salas de 12 hospitales públicos en la Comunitat Valenciana.

Un apoyo emocional único

Gracias al respaldo de la Fundación «la Caixa», Payasospital lleva sonrisas y alegría a los niños y niñas ingresados, sus familias y el personal sanitario. Cada semana, un grupo de payasos profesionales pone en marcha actuaciones personalizadas directamente en las habitaciones de los pequeños, brindando un apoyo psicológico que mejora su calidad de vida.

Más que risas: acompañamiento integral

Además de las visitas en los hospitales, Payasospital también acompaña a los pacientes al quirófano, realiza visitas domiciliarias y ofrece intervenciones a través de videollamada. Su labor no se limita únicamente a los niños: también extienden su apoyo a adultos en determinadas áreas y, desde 2024, visitarán a mayores dependientes en dos centros sociosanitarios de Valencia.

Ayuda en situaciones de crisis

Recientemente, Payasospital ha llevado a cabo actuaciones especiales para niños y familias que han sufrido las consecuencias de inundaciones devastadoras. Este enfoque integral resalta su compromiso no solo con los pacientes, sino también con las comunidades afectadas.

Intervenciones a medida para un impacto real

La clave de su éxito radica en que cada intervención es «personalizada» y adaptada a las circunstancias del menor. La coordinación con el personal sanitario es fundamental para diseñar estas experiencias. A través de música, marionetas, pompas de jabón y otros recursos artísticos, se busca liberar tensiones, permitiendo que los niños y sus familias enfrenten la hospitalización con una actitud más positiva.

Conclusión: Risa y resiliencia en cada visita

Payasospital no solo mejora la calidad de vida de los pequeños pacientes, sino que ofrece un respiro tanto para las familias como para el personal médico. En un entorno tan complicado como el hospitalario, la risa se convierte en un poderoso remedio, demostrando que el bienestar emocional es tan vital como el tratamiento médico.