A pesar de los significativos desafíos que enfrentó la transición energética en 2024, como el elevado consumo de carbón en diversas regiones, tensiones geopolíticas y una crisis económica, un nuevo informe titulado "Escenarios de Transición Verde" presenta un panorama optimista sobre el futuro de las energías renovables a nivel global.

El documento destaca la rápida expansión de estas fuentes, la reducción de costos y la disminución de emisiones de carbono para 2050.

El informe, elaborado por la firma noruega Statkraft junto a 50 expertos, prevé que los costos de generación eléctrica a partir de energía eólica y solar se reducirán en aproximadamente un 50% en la Unión Europea para 2050. Esto consolidará ambas tecnologías como las fuentes de energía más competitivas, limpias y resistentes a las perturbaciones geopolíticas.

Los resultados son asombrosos: la energía solar verá un crecimiento exponencial, multiplicando su capacidad de generación por 13, mientras que la energía eólica lo hará por 7 hacia 2050.

Además, el costo de las baterías y vehículos eléctricos continúa disminuyendo, lo cual promueve la electrificación del transporte y avanza en la descarbonización.

Incluso en un escenario moderadamente pesimista, se prevé que las energías renovables duplicarán su contribución a la matriz energética mundial para 2050. Las emisiones de CO₂ relacionadas con la energía disminuirán significativamente, alineándose con los objetivos de limitar el aumento de la temperatura global entre 1,9 y 2,4 °C.

Pero, ¿qué significa esto para Chile? Según el informe, el país podría estar en una encrucijada histórica gracias a su elevado potencial para la generación de energías renovables, especialmente a partir de fuentes solares y eólicas.

La continua reducción de costos ofrece una oportunidad única para acelerar la transición energética en el país, fomentar la inversión en infraestructura limpia y establecer a Chile como un líder en descarbonización en América Latina.

El documento enfatiza la urgencia y viabilidad de avanzar hacia un futuro sostenible, subrayando que decisiones políticas acertadas y la innovación tecnológica serán esenciales en este proceso.

El informe también presenta tres escenarios globales hacia 2050.

El primero es el "Escenario de Transición Verde", que será impulsado por políticas robustas, innovación tecnológica y un compromiso común para alcanzar emisiones netas cero.

El segundo es el escenario de "Rivalidad Tecnológica Limpia", marcado por la competencia entre países por liderar en energías limpias.

Por último, el escenario de "Transición Retrasada", que reflejará un avance más lento debido a bloqueos políticos o normativos, aunque las energías renovables seguirán siendo fundamentales.

En conclusión, el futuro se pinta prometedor para las energías renovables, pero el camino hacia la sostenibilidad requerirá de acciones concretas y un enfoque comprometido por parte de los gobiernos y la sociedad en su conjunto.