La empresa australiana Cortical Labs ha logrado un verdadero hito en la inteligencia artificial con la creación de CL1, el primer ordenador biológico del mundo que combina células cerebrales humanas con hardware de silicio. Esta innovadora tecnología, presentada en una destacada conferencia en Barcelona el 2 de marzo de 2025, está destinada a tener un impacto significativo en la investigación científica, la medicina y muchos más campos.

Un cambio radical en la computación

El CL1 representa un nuevo paradigma en la computación, ofreciendo una inteligencia más dinámica, sostenible y eficiente. A diferencia de las actuales granjas de servidores con GPU, que consumen grandes cantidades de energía, el CL1 utiliza entre 850 y 1.000 W por rack, lo que lo convierte en una opción considerablemente más ecológica y económica.

Este sistema no solo consume menos energía, sino que también opera de manera autónoma, sin necesidad de una computadora externa, lo que lo convierte en una herramienta versátil para los investigadores.

Tecnología biológica avanzada

El CL1 se basa en un modelo de Inteligencia Biológica Sintética que incluye células neuronales humanas cultivadas sobre un chip de silicio. Esta fusión permite que las células se adapten y formen nuevas conexiones por sí solas, ofreciendo una capacidad sin precedentes para el procesamiento de información. Este avance es el resultado de casi seis años de investigación, que incluye hitos importantes como el famoso experimento DishBrain, donde las células cerebrales fueron entrenadas para jugar al videojuego Pong mediante estímulos eléctricos.

Acceso revolucionario con Wetware-as-a-Service

Para democratizar el acceso a esta tecnología, Cortical Labs ha introducido el concepto de «Wetware-as-a-Service» (WaaS). Esto permitirá a investigadores y empresas acceder al CL1 de forma remota a través de la nube, facilitando su uso en el descubrimiento de fármacos, pruebas clínicas y el desarrollo de inteligencias artificiales. Este nuevo modelo cambiará la forma en que se llevan a cabo estas investigaciones, eliminando la necesidad de hardware especializado.

Beneficios para la salud

El potencial del CL1 en el ámbito médico es vasto. Desde la investigación de enfermedades neurológicas como Alzheimer hasta la optimización de pruebas de fármacos sin necesidad de usar animales en ensayos, esta tecnología tiene el poder de transformar la salud. Un proyecto ambicioso en desarrollo es la creación de un «Cerebro Mínimo Viable» (Minimal Viable Brain, MVB), que buscará conservar las funciones esenciales del cerebro para el procesamiento dinámico de información.

Desafíos éticos y regulatorios

Pese a las múltiples ventajas del CL1, su desarrollo no ha estado exento de controversias. La capacidad del sistema para emular procesos cognitivos humanos ha suscitado debates sobre la ética y los usos responsables de esta tecnología. Cortical Labs se encuentra comprometido en trabajar bajo estrictos estándares éticos y regulatorios, colaborando con autoridades y expertos para asegurar un desarrollo seguro.

Además, es importante mencionar que las aplicaciones del CL1 se extienden también a la robótica y la inteligencia artificial, abriendo un mundo de posibilidades en diversas disciplinas. Aunque se enfrentan desafíos en la obtención de financiamiento y la clasificación del CL1 como una inversión viable, su impacto potencial es indiscutible.

El futuro de la inteligencia biológica

Con un costo inicial proyectado de aproximadamente 32.500 euros, el CL1 se presenta como una opción más accesible en comparación con otras tecnologías en el mercado, que suelen estar por encima de los 80.000 euros. Esto podría impulsar su adopción en múltiples sectores y sobremanera en el ámbito académico.

Cortical Labs se posiciona así a la vanguardia de una nueva era en la computación biológica, marcando el comienzo de una auténtica revolución en las tecnologías de inteligencia artificial y medicina que podría cambiar la forma en que entendemos la vida y la tecnología. ¡El futuro está aquí y es más brillante que nunca!