La ministra del Interior de Chile, Carolina Tohá, fue clara en su reciente intervención sobre los avances en la seguridad en el país. En una ceremonia destinada a la entrega de nuevos vehículos para las fuerzas policiales, Tohá enfatizó que "los cambios que estamos teniendo en Chile son de grandes magnitudes".

Este evento se enmarca dentro del Plan Nacional contra el Crimen Organizado, donde se presentaron medidas contundentes para robustecer a la policía chilena. Entre las iniciativas destacadas, se incluyen la entrega de 5.000 pistolas Glock, un inminente cambio de uniformes para Carabineros, y un incremento sustancial en la asignación de riesgo, lo que refleja un fuerte compromiso del gobierno con la seguridad pública.

Uno de los puntos más emocionantes de su discurso fue el avance del proyecto de creación del nuevo Ministerio de Seguridad. Tohá mencionó que ya se logró un consenso en el Congreso, algo que ha sido un objetivo discutido durante 18 años. "Ayer despachamos de la Comisión Mixta el texto que dará lugar a la creación del Ministerio de Seguridad, tenemos finalmente un texto acordado por ambas Cámaras y prácticamente consensual", afirmó.

Adicionalmente, la ministra hizo hincapié en otros avances legislativos como el segundo trámite de las Reglas del Uso de la Fuerza (RUF), que traerán un cambio significativo en las operaciones policiales. También destacó la Ley de Plantas de la Policía de Investigaciones (PDI), que se espera que multiplique el número de agentes policiales de 950 a 4.000, un salto monumental en las capacidades de investigación del país. Asimismo, la nueva Ley de Narcofunerales también fue mencionada como parte de este paquete de reformas necesarias para enfrentar el crimen organizado.

En un contexto electoral, Tohá subrayó que estos cambios son lo que los ciudadanos esperan del gobierno. "No que no discutamos, no que no tengamos desacuerdos, pero al final nos pongamos de acuerdo y avancemos. En el día de ayer, avanzamos”, insistió la ministra, mostrando su optimismo por el futuro.

"Los funcionarios que van a conducir estos vehículos no solo estarán en un coche nuevo, sino que contarán con mejores equipamientos, leyes más claras y una institucionalidad más fuerte. Lo que todos esperamos es que cuenten con las mejores condiciones para proteger a nuestra ciudadanía”, concluyó Tohá.

Con este tipo de iniciativas, el gobierno chileno busca no solo mejorar la seguridad, sino también ganar la confianza de la población en un periodo tan crucial como el actual.