En la actualidad, los hematólogos cuentan con un amplio arsenal terapéutico que está revolucionando la medicina de precisión en el tratamiento de los tumores hematológicos. Este conjunto de neoplasias, que incluye leucemias y linfomas, se ha convertido en el quinto cáncer más común en España, con más de 25.000 nuevos casos esperados para 2024, según datos de la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM).

Innovaciones como los inhibidores de la tirosin-quinasa, los anticuerpos conjugados, los anticuerpos biespecíficos y las terapias CAR-T están transformando completamente el panorama para los pacientes. Estos tratamientos han demostrado un impacto significativo en la calidad de vida, la supervivencia libre de progresión y la supervivencia global. La Dra. Raquel de Paz, del Hospital Universitario La Paz, comenta: “Estos tratamientos son muy diferentes de la quimioterapia y los trasplantes. Esperamos que puedan sustituir estos enfoques tan agresivos, brindando una alternativa menos dañina para los pacientes”.

Un factor importante en el aumento del número de diagnósticos es la mejora en la detección y el diagnóstico precoz de la enfermedad. La Dra. María Jesús Blanchard, del Hospital Universitario Ramón y Cajal, explica que antes las enfermedades como el mieloma no se diagnosticaban hasta que se producían complicaciones severas. Con los avances actuales, los datos se están recopilando de manera más efectiva, aunque todavía existen áreas de mejora en la coordinación entre hospitales.

Sin embargo, a pesar del progreso, no todos los pacientes frágiles pueden beneficiarse de estos tratamientos avanzados. En el caso de los pacientes mayores, el enfoque a menudo se centra en mejorar la calidad de vida a través de tratamientos de soporte. La Dra. De Paz señala que, en el mieloma múltiple, lo que realmente importa es el estado de salud general del paciente más que solo la edad.

A pesar de los beneficios, hay que tener en cuenta que estos tratamientos más complejos pueden conllevar toxicidades que requieren un manejo específico. Como explica la Dra. Blanchard, “estamos colaborando con otros especialistas para crear circuitos que ayuden a reducir estas toxicidades y permitir un tratamiento más integral para nuestros pacientes.”

La esperanza es que estos avances en la medicina de precisión continúen, ofreciendo a los pacientes con cáncer hematológico una calidad de vida mejorada y nuevas oportunidades de supervivencia. ¡El futuro de la hematología nunca se ha visto tan prometedor!