Ciencia

¿Podría haber vida en tu microondas? Un descubrimiento que desafía nuestra percepción

2024-09-16

La búsqueda de microorganismos es una actividad crucial que podría evitar un futuro muy negativo para la humanidad. Los científicos están explorando lugares extremosos como el Lago Vostok, que se encuentra a 3,500 metros bajo la superficie del hielo antártico, o el volcán Dallol en Etiopía, donde se generan aguas hirvientes con niveles de acidez peligrosamente altos. En este entorno hostil, que parecía inimaginable para la vida, se ha descubierto algo sorprendente.

En 2019, un equipo del Centro de Astrobiología en España logró encontrar microorganismos en el volcán Dallol, sorprendiendo a la comunidad científica y reavivando la esperanza de que la vida pueda existir en otros planetas como Marte. Se identificaron como nanohaloarqueas, seres que se adaptan perfectamente a condiciones extremas, planteando la intrigante pregunta: si la vida puede prosperar aquí, ¿quién dice que no en otros mundos?

Los científicos que han trabajado en estos entornos extremos no son ajenos a la búsqueda de la vida. Un grupo, liderado por el laboratorio de Manuel Porcar de la empresa Darwin Bioscience, ha adoptado un enfoque innovador al investigar lugares inusuales. Desde la tierra y el asfalto hasta los chicles pegados en las calles, su curiosidad no conoce límites. En un estudio innovador, encontraron comunidades de microorganismos en los chicles, un entorno con escaso oxígeno, agua y nutrientes. Estos microorganismos eran capaces de sobrevivir extrayendo nutrientes del propio chicle, lo que sugiere que podría haber aplicaciones industriales para degradar residuos de goma de mascar o incluso plásticos.

Este notable trabajo les valió el premio Ig Nobel en Ecología en 2021, una parodia de los Premios Nobel que honra investigaciones inusuales pero que invitan a la reflexión. El galardón es simbólico y, en este caso, sirvió para poner de relieve la importancia de entender cómo afectan estos microorganismos a nuestro mundo.

¿Pero hay vida en tu microondas?

El microondas es un electrodoméstico presente en la mayoría de los hogares, y resulta que sus condiciones no son tan estériles como se pensaba. El dispositivo calienta los alimentos mediante un magnetrón que convierte la electricidad en microondas, afectando a cualquier organismo que se encuentre dentro. Sin embargo, un reciente estudio de Alba Iglesias, publicado en Frontiers in Microbiology, ha revelado que en un análisis de 30 microondas, tanto domésticos como de laboratorio, se aislaron 101 cepas diferentes de bacterias, incluyendo algunas que pueden causar intoxicaciones alimentarias, como Klebsiella y Brevundimonas.

Este hallazgo sugiere la necesidad urgente de limpiarlos regularmente. Además, pone en evidencia que ciertos microorganismos pueden adaptarse y sobrevivir en condiciones que, a simple vista, parecen hostiles.

Más allá de las implicaciones curiosas de la vida en un electrodoméstico común, la búsqueda de microorganismos en ambientes extremos también tiene aplicaciones prácticas que trascienden lo académico. Las adaptaciones genéticas encontradas en estos organismos pueden ser fundamentales para la biotecnología. Por ejemplo, las bacterias que descomponen chicles ofrecen la promesa de una solución para la plaga de residuos plásticos que enfrentamos hoy en día. Así que la próxima vez que enciendas tu microondas, piensa: podría no ser la estéril caja que creías, ¡sino un pequeño ecosistema lleno de vida capaz de enseñarnos mucho sobre supervivencia y adaptación!