País

Macarena Ripamonti: La Candidata Rebelde que Sacude a La Moneda

2024-09-25

La alcaldesa de Viña del Mar, Macarena Ripamonti (FA), ha dejado claras sus posiciones sobre la crisis de seguridad en Chile. "Los resultados de las medidas implementadas por las autoridades en materia de seguridad no han funcionado; por lo tanto, si se buscan resultados distintos, se deben tomar acciones drásticamente diferentes", declaró este lunes, incendiando el debate en La Moneda.

Sus críticas no se detuvieron ahí; destacó que su intervención tenía como objetivo no solo un balance de las Fiestas Patrias, sino también tratar de posicionar su propuesta de creación de una policía municipal en el marco de la próxima presentación de la Ley de Presupuesto.

La respuesta del gobierno no se hizo esperar. Manuel Monsalve, subsecretario del Interior, defendió la estrategia del Ejecutivo, afirmando: "Lo que necesita el país son más policías. La única manera seria de tener más carabineros es ampliando las capacidades para formarlos cada año". Sin embargo, el tono desafiante de Ripamonti inquietó a sectores dentro de la administración.

No es la primera vez que la alcaldesa se enfrenta al gobierno. Ya lo hizo tras los devastadores incendios que afectaron a su región, y a pesar de su filiación política, su lealtad parece estar más alineada con las necesidades de sus habitantes que con las directrices de su partido.

En su entorno, se reconoce que la alcaldesa adopta una postura "rebelde", pero justifican que es "viñamarina antes que todo". Además, sus críticas, aunque poco frecuentes en el pasado, se intensifican a medida que se acercan las elecciones municipales de octubre.

Este jueves, se espera que Ripamonti deje su cargo de forma provisional para iniciar su campaña electoral. Las fuentes indican que este movimiento podría contribuir a su distanciamiento del gobierno. A pesar de esto, hay quienes argumentan que sus críticas podrían beneficiar su imagen frente a sus electores.

Las tensiones han escalado hasta el punto que, en varias ocasiones, ha tenido enfrentamientos directos con la ministra del Interior, Carolina Tohá, así como con otros miembros del gabinete, señalando la falta de apoyo en la reconstrucción tras los desastres naturales.

El desafío que representa Ripamonti para el gobierno también se ilustra en sus interacciones con la población local. Según algunos residentes, su discurso ha resonado profundamente, ya que ella representa una voz enérgica ante el aumento de la violencia y la inseguridad que afecta a sus comunidades. Sin embargo, los expertos advierten que su retórica confrontacional podría tener efectos negativos en su relación con La Moneda y en su propia campaña.

Muchos en el partido de gobierno sienten que su forma de enfrentar al Ejecutivo podría alterar la dinámica política en la región. Algunos parlamentarios, como Tomás de Rementería (indep.-PS), definen su enfoque como una representación legítima de sus comunidades, enfatizando que "como autoridad electa es evidente que nuestra primera responsabilidad es representar a las comunidades que nos eligieron".

Mientras la batalla por la reelección se intensifica, la figura de Macarena Ripamonti se convierte en un centro de atención no solo por sus propuestas, sino también por su audaz capacidad para desafiar las normas establecidas y confrontar a un gobierno que tiembla ante su creciente popularidad.

¿Logrará Ripamonti mantener esta dinámica desafiante, o su campaña terminará siendo aplastada por el aparato político tradicional? Solo el tiempo lo dirá, pero una cosa es clara: su presencia en la política chilena está lejos de ser trivial.