¿Alguna vez has pensado en el papel vital que las mujeres han jugado en la psicología a lo largo de la historia? Aunque a menudo se recuerda a figuras masculinas como Freud, el legado femenino en este campo ha sido, en gran medida, ignorado. Para enmendar esta omisión, la Facultad de Psicología de la Universidad de Barcelona (UB) ha decidido hacer un homenaje a las mujeres más influyentes en esta disciplina, a través de una exposición informativa en los pasillos del edificio.

Históricamente, las aportaciones de las mujeres en psicología han sido minimizadas. Hasta casi finales del siglo XIX, las mujeres enfrentaron grandes dificultades para acceder a la educación superior, siendo en muchos casos limitadas a matricularse como oyentes sin el derecho a graduarse, y esto solo bajo la condición de permanecer solteras.

Un ejemplo emblemático es Mary Whiton Calkins (1863-1930), una pionera que logró matricularse en Harvard. Llevó a cabo labores de investigación y docencia, también manejando responsabilidades familiares. Su tesis fue considerada el mejor trabajo presentado jamás en Harvard, sin embargo, nunca recibió el título oficial de doctora, lo que refleja el claro sesgo de género de la época. Calkins se destacó en la investigación sobre el paradigma de pares asociados, y más tarde se convirtió en presidenta de la Asociación Americana de Psicología y de la Sociedad Filosófica Americana.

Christine Ladd-Franklin (1847-1930), otra figura crucial, fue la primera mujer en presidir la Asociación Americana de Psicología. A pesar de ser una destacada matemática y científica, no obtuvo su título universitario hasta 44 años después de completar su formación. Junto a George Elias Müller, desarrolló una teoría sobre la percepción del color, estableciendo que la sensibilidad al rojo y al verde es la última en desarrollarse, lo que explica su predominancia en los casos de daltonismo.

También debemos recordar a Mercedes Rodrigo Bellido (1891-1982), considerada la primera psicóloga española. Su travesía por Europa le permitió relacionarse con reconocidos expertos como Piaget y Claparède. Rodrigo se destacó en la investigación educativa en España, enfocándose en personas con discapacidad visual y auditiva. Después de la Guerra Civil, tuvo que exiliarse en América Latina, donde continuó su labor formando a nuevos especialistas en psicología.

La Facultad de Psicología de la UB también pretende visibilizar otras contribuciones olvidadas de mujeres en el ámbito de la psicología a nivel local. La acción busca no solo rendir homenaje, sino también inspirar a nuevas generaciones a conocer y aprender sobre la historia completa de esta fascinante disciplina. ¡No te pierdas esta impresionante exposición que honra a las mujeres que han cambiado el rumbo de la psicología!