¡La próxima gran erupción volcánica podría ser catastrófica! ¿Estamos realmente preparados para el caos que se avecina?
2024-12-24
Autor: Emilia
(CNN).- El Monte Tambora, en Indonesia, cambió el curso de la historia en 1815. Su erupción fue la más poderosa registrada, enviando material volcánico a la estratosfera y ocasionando lo que se conoció como "el año sin verano". Las temperaturas globales se desplomaron, las cosechas fallaron y miles de personas sufrieron hambre. Este evento extremo, que algunos creen inspiró la creación de 'Frankenstein' de Mary Shelley, nos recuerda cómo un solo volcán puede alterar dramáticamente la vida en nuestro planeta.
Más de 200 años después, los científicos alertan sobre la posibilidad de otra erupción masiva durante este siglo. Markus Stoffel, profesor de clima en la Universidad de Ginebra, señala que la evidencia geológica sugiere una probabilidad de 1 entre 6 de que ocurra. Pero esta vez, sería en un mundo mucho más poblado y afectado por la crisis climática.
"La humanidad no tiene un plan adecuado para enfrentar un caos climático" que pueda seguir a una erupción, advierte Stoffel. Los volcanes no solo crean terrenos y atmósferas; también pueden cambiar el clima de manera drástica. Durante una erupción, se liberan gases como el dióxido de carbono y el dióxido de azufre, este último crucial para el cambio climático. El dióxido de azufre puede provocar enfriamiento global, dispersándose por la atmósfera y reflejando la luz solar de vuelta al espacio durante años.
Un ejemplo reciente es el Monte Pinatubo en Filipinas, cuya erupción en 1991, aunque no tan devastadora como la de Tambora, enfrió el planeta en aproximadamente 0,5 grados Celsius. Las erupciones volcánicas pasadas indican que podrían reducir las temperaturas globales en 1 a 1,5 grados, con implicaciones graves para el clima y los patrones de precipitación, alterando monzones y afectando la agricultura en regiones críticas como Estados Unidos, China y Rusia.
Pero el próximo evento sería en un mundo mucho más cálido. Según Michael Rampino de NYU, "es un mundo más inestable ahora". Las interacciones entre el clima, el aumento de temperaturas y las erupciones volcánicas podrían resultar en consecuencias peores que las que se observaron tras la erupción de Tambora.
El perigo no es solo inmediato; a largo plazo, las pérdidas económicas podrían ser astronómicas. Un estudio de Lloyd’s estima que en un escenarios catastrófico similar al de Tambora, las pérdidas podrían superar los 3,6 billones de dólares en el primer año. Esta disminución de temperatura, aunque podría parecer un alivio temporal frente al cambio climático, es engañosa; pronto el planeta podría retornar a su estado anterior, cargando con más problemas.
Con millones de personas viviendo en zonas de riesgo, la necesidad de preparación es inminente. Existen áreas como el Parque Nacional Yellowstone, en EE. UU. y varias regiones volcánicamente activas en Indonesia que están bajo escrutinio. Sin embargo, el desafío se mantiene: las erupciones masivas son difíciles de predecir. Stoffel demanda a los expertos que desarrollen planes de contingencia, evacuación y garantías de suministro. La conclusión es clara: aunque muchos consideren que la probabilidad de una erupción masiva es baja, no es inexistente, y el mundo no está para nada preparado para enfrentar tal eventualidad. ¡El tiempo para actuar es ahora!