En agosto de 2022, la LIV Golf realizó un movimiento que cambiaría la historia del golf mundial al reclutar al destacado chileno Joaquín Niemann con un impresionante cheque de 100 millones de dólares. Este acuerdo marcó su salida del PGA y lo posicionó en una competición con incentivos financieros sin precedentes.

Este nuevo circuito ha permitido a Niemann, junto a su compatriota Mito Pereira, convertirse en los deportistas chilenos con mayores ganancias por premios en la historia. La reciente temporada individual del tour árabe, celebrada en Chicago, fue un testimonio claro de su éxito. En Illinois, Niemann obtuvo un meritorio segundo lugar tras una intensa lucha por el título con el español Jon Rahm, lo que le otorgó un jugoso cheque de 1,875 millones en moneda local.

Así, Joaquín cerró un productivo 2024 que incluyó dos títulos: Mayakoba y Jeddah, y se colocó en buenos puestos en otros torneos relevantes, como un segundo en el Reino Unido y un tercer lugar en Nashville. Estos logros no solo son un reflejo de su talento en el green, sino que también impactaron fuertemente su cuenta bancaria, donde acumuló ingresos cercanos a los 15,7 millones de dólares solo en premios de esta temporada.

Desde que realizó la transición de la PGA a la LIV Golf, Niemann ya se había establecido como el deportista chileno con la mayor recaudación en la historia del deporte nacional, acumulando hasta ese momento más de 15,5 millones de dólares en premios, superando a leyendas del deporte como Marcelo Ríos, que logró 9,7 millones en su carrera.

Los números en la LIV Golf son abrumadores, ya que en 2023, un año que no fue su mejor, Niemann aún así sumó casi 7,3 millones de dólares a su cuenta. Esta cantidad, sumada a los 4,8 millones de 2022, subraya el auge del chileno en este competitivo circuito respaldado por Arabia Saudita, con un patrimonio soberano que alcanza los 800 mil millones de dólares.

En total, desde su debut como golfista profesional, Joaquín Niemann ha acumulado impresionantes ganancias de más de 44,4 millones de dólares, casi cinco veces más que lo que ganó el legendario tenista Chino Ríos en su apogeo.