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¡Increíble! Vaticana canoniza a beata italiana gracias a un milagro en Chile

2025-01-29

Autor: Sofía

El Vaticano ha anunciado la canonización de la beata italiana Vincenza María Poloni, impulsada por un milagro que involucra a una mujer chilena que estuvo al borde de la muerte en 2014. Este notable suceso ocurrió en Los Ángeles, Chile, y ha asombrado a muchos.

La historia comienza en diciembre de 2013, cuando Audelia Parra, de 63 años, enfrentó una grave crisis de salud debido a una fisura en la arteria aorta. A pesar de múltiples cirugías, los médicos consideraban que su estado era crítico y que no sobreviviría mucho tiempo más.

En medio de esta angustiante situación, su nieto, Álvaro Martínez, un joven seminarista, decidió rezar fervientemente ante la imagen de Vincenza María Poloni, quien había sido beatificada en 2008. Su oración, llena de fe y esperanza, marcó el inicio de un asombroso giro en la trama.

Y lo que ocurrió después fue nada menos que un verdadero milagro. Audelia comenzó a recuperarse de una manera inesperada y médica. Para el 31 de enero de 2014, fue dada de alta, después de haber estado a las puertas de la muerte. Álvaro narró que, junto a su familia, decidieron rezar a la beata para pedir su intercesión.

Al enterarse de esta extraordinaria recuperación, el joven contactó a las Hermanas de la Misericordia en Quilleco. Ellas le indicaron que debía enviar la documentación del caso a la congregación en Verona, ya que podrían estar frente a un milagro genuino. "Ellas tomaron los antecedentes y se lo presentaron al postulador de la causa, el padre Tiziano Bonomi", relató Martínez.

La investigación por parte del Vaticano duró más de una década, finalmente, se establece este acto de canonización. Desde entonces, Audelia continúa viva y goza de buena salud, un testimonio que deja perplejos a muchos.

Es importante destacar que Vincenza nació en 1802 en Verona, Italia, y desde joven mostró un profundo compromiso con la vida religiosa. Ingresó al convento de Pio Ricovero a los 16 años y dedicó su vida a ayudar a los más necesitados, fundando eventualmente el Instituto de las Hermanas de la Misericordia. Falleció en 1855 y fue beatificada por el Papa Benedicto XVI, un eco de su dedicación inquebrantable a la fe y a la comunidad.

La canonización, como lo explica la Iglesia, es un proceso minucioso que examina diversos aspectos de la vida del beato, lo que añade un matiz aún más asombroso a esta historia de fe y recuperación extraordinaria.