Ciencia

¡Increíble! Una sola sesión de ejercicio podría contener el crecimiento del cáncer, según un nuevo estudio

2025-09-11

Autor: Valentina

Un hallazgo asombroso sobre el ejercicio y el cáncer

Un nuevo y sorprendente estudio realizado en Australia revela que una sola sesión intensa de ejercicio puede ser clave para frenar el crecimiento de células cancerosas, específicamente del cáncer de mama. Este descubrimiento podría cambiar la manera en que entendemos la relación entre la actividad física y la salud.

Transformación en el cuerpo tras el ejercicio

La investigación, liderada por Robert Newton del Exercise Medicine Research Institute de la Universidad Edith Cowan, examinó a 32 mujeres que habían superado el cáncer de mama. Los resultados mostraron que el ejercicio no solo ayuda a prevenir la enfermedad, sino que también afecta directamente la biología celular del cáncer.

¿Qué sucede en la sangre?

Después de una intensa sesión de entrenamiento, se detectó en la sangre un aumento en ciertas moléculas que, al ser aplicadas en un laboratorio a células de cáncer de mama, lograron suprimir su crecimiento. ¡Increíble pero cierto!

Newton destacó que "nuestro trabajo demuestra que el ejercicio puede influir directamente en la biología del cáncer, suprimiendo el crecimiento tumoral mediante señales moleculares poderosas".

El papel crucial de las myokinas

El secreto detrás de este efecto se encuentra en las myokinas, sustancias liberadas por los músculos durante el ejercicio. Entre ellas, la interleucina-6 (IL-6) se destaca por su capacidad para regular la respuesta inmunitaria y la inflamación.

El estudio descubrió que niveles más altos de IL-6 en la sangre tras el ejercicio conducían a una mayor inhibición del crecimiento de células cancerosas. Curiosamente, los entrenamientos con intervalos de alta intensidad fueron los más efectivos, sugiriendo que la intensidad juega un papel importante en la respuesta anticancerígena.

La metodología del estudio

Para este estudio, se reclutó a mujeres post-cáncer de mama que no realizaban ejercicio regularmente. Fueron divididas en dos grupos: uno realizó entrenamiento de intervalos de alta intensidad, mientras que el otro se dedicó al levantamiento de pesas durante la misma duración.

La sangre fue extraída antes y después de las sesiones para evaluar el plasma sobre las células cancerosas en laboratorio, y los resultados fueron sorprendentes. El plasma post-ejercicio, especialmente del grupo de intervalos, detuvo el crecimiento de muchas células cancerosas.

Expertos respaldan el ejercicio como terapia

Expertos externos, como Jessica Scott del Memorial Sloan Kettering, afirmaron que los programas de ejercicio intenso son seguros y beneficiosos para sobrevivientes de cáncer. Kerry Courneya, profesor de la Universidad de Alberta, agregó que los beneficios de ejercicios leves son menores comparados con los intensos.

Un nuevo enfoque en el tratamiento del cáncer

El impacto de estos hallazgos va más allá de la prevención. Estudios anteriores han demostrados que la actividad física regular mejora la supervivencia en diversos tipos de cáncer. Ahora, el ejercicio se perfila como una opción valiosa en tratamientos para quienes han superado la enfermedad.

Sin embargo, los investigadores advierten la importancia de consultar con un oncólogo antes de iniciar cualquier programa de ejercicio.

Perspectivas futuras de la investigación

A pesar de los prometedores resultados, quedan preguntas por resolver sobre la eficacia de distintos tipos y niveles de ejercicio. El equipo enfatiza que el ejercicio debe ser considerado una herramienta accesible y económica para mejorar la salud y reducir el riesgo de recaída, siempre bajo la supervisión de un profesional médico.

Este importante estudio refuerza la idea de que el ejercicio no es solo un complemento, sino una estrategia terapéutica de primer orden en la lucha contra el cáncer. ¡La ciencia nunca deja de sorprender!