A veces, ingerir un líquido lleno de virus bajo supervisión médica puede marcar la diferencia entre la vida y la muerte. Este es el sorprendente caso de Irene Nevado, quien ha luchado toda su vida contra la fibrosis quística, una enfermedad rara que la llevó a necesitar dos trasplantes de pulmón, los cuales le fueron negados debido a una peligrosa bacteria.

La solución llegó a través de la fagoterapia: una innovadora técnica que consiste en inhalar un líquido que contiene bacteriófagos, esos virus que son capaces de devorar bacterias.

Esta terapia se está investigando como una alternativa prometedora para combatir el creciente problema de las superbacterias, resistentes a los antibióticos, que causan alrededor de 4,000 muertes al año en España.

¿Cómo funciona, te preguntarás? Por cada bacteria conocida, existe uno o varios fagos que pueden eliminarla. Estos fagos son extremadamente específicos, lo que significa que pueden erradicar solo los microbios dañinos sin afectar a aquellos que son beneficiosos para nuestra salud.

En el caso de Irene, la fagoterapia aplicada en un tratamiento experimental de la Universidad de Valencia fue un éxito rotundo. A sus 45 años, recuperó su capacidad pulmonar y, lo más importante, se ha deshecho de la bacteria resistente. ¡No necesitará un tercer trasplante!

Este avance no solo representa una victoria personal para Irene, sino también una luz de esperanza en la lucha contra las infecciones por superbacterias.