El ex presidente Donald Trump tuvo una conversación telefónica sorprendente el pasado 19 de marzo de 2025 con el presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski. Durante este intercambio, propuso que Estados Unidos se adueñara de las centrales eléctricas en Ucrania, argumentando que esto sería la "mejor protección y apoyo posibles" para el país en medio del conflicto con Rusia.

Zelenski, por su parte, mostró disposición para parar los ataques a las infraestructuras civiles y energéticas en Rusia, tras las palabras de Vladimir Putin, quien se comprometió a proteger temporalmente el sector energético en conversaciones recientes con Trump. Esta decisión viene en un momento crucial, donde ambos líderes buscan pavimentar el camino hacia una posible paz.

El presidente Zelenski mencionó en un mensaje en la plataforma X que una de las primeras medidas para acabar con la guerra podría incluir el cese de ataques a instalaciones energéticas y otras infraestructuras civiles. En la conversación, se discutió especialmente sobre la planta nuclear de Zaporiyia, actualmente bajo ocupación rusa.

Es notable que, en comparación con la reciente visita de Zelenski a la Casa Blanca, donde fue recibido con más hostilidad, el tono de esta conversación fue claramente más conciliador. Zelenski declaró a los periodistas que no sintió presión durante su intercambio con Trump, calificándolo de "positivo, sustancial y franco".

Por su parte, Trump compartió en su red Truth Social que la llamada había sido productiva, enfatizando que parte de la conversación se centró en alinear las necesidades y demandas de Ucrania y Rusia. Todo esto ocurre en un entorno de cambio, ya que Rusia y Ucrania anunciaron recientemente un intercambio de 175 prisioneros de guerra de ambos lados, lo que brinda un rayo de esperanza en medio de la crise.

Durante su conversación, Zelenski también solicitó más armas a Trump, lo que incluyó sistemas de defensa antiaérea. La portavoz de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, afirmó que el ex presidente accedió a trabajar con Zelenski para explorar opciones, especialmente en relación con los sistemas Patriot. Además, se confirmó que el intercambio de inteligencia militar para defender a Ucrania continuará.

Es interesante señalar que Estados Unidos había suspendido temporalmente la ayuda militar hasta que Ucrania aceptara un alto el fuego total de 30 días. Aunque Ucrania estuvo dispuesta a ceder, Trump no logró convencer a Putin, lo que pone de relieve la complicada dinámica de poder en la región.

La propuesta de Trump de que EE.UU. posea las centrales nucleares y eléctricas de Ucrania es definitivamente una estrategia audaz que evoca su enfoque de los asuntos diplomáticos como si fueran transacciones comerciales. Además, Trump se comprometió a actuar para repatriar a los niños ucranianos que han sido "secuestrados" desde el inicio de la invasión rusa en febrero de 2022, añadiendo otra capa de complejidad a la ya tensa situación.

Esta conversación marca un momento crucial en las relaciones entre Estados Unidos y Ucrania, levantando muchas más preguntas sobre el futuro del país europeo y el papel de EE.UU. en su defensa.