Las alarmas están encendidas en Los Ángeles, California, donde un reciente brote de incendios ha devastado la región, dejando tras de sí una estela trágica de más de 25 muertes y 12,000 estructuras en cenizas. En medio de esta calamidad, investigadores están buscando respuestas y han surgido nuevas teorías sobre cómo una chispa podría haber revivido lo que se creía un incendio extinguido.

Según reportan medios estadounidenses como The Wall Street Journal, las investigaciones apuntan a que un incendio pequeño, que tuvo lugar durante la madrugada del Nuevo Año, podría ser el culpable de la catástrofe que se desató desde el 7 de enero. La portavoz de la Oficina Federal de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos (ATF), Ginger Colbrun, afirmó que "estamos analizando todas las posibilidades y revisando imágenes de video de los residentes".

Los investigadores han encontrado conexiones entre el incendio en Pacific Palisades, una zona donde residen muchas celebridades, y el pequeño fuego del 1 de enero, que fue rápidamente controlado. Mediante el uso de fotografías, imágenes satelitales y testimonios de los vecinos, se ha determinado que ambos incendios comenzaron en un área cercana a los senderos de Temescal Ridge, frecuentados por excursionistas y ciclistas, lo que plantea preocupaciones sobre la seguridad en zonas recreativas.

"No hay órdenes de evacuación general" había asegurado una alerta tras el primer incendio, pero el miedo se hizo evidente en la comunidad cuando los olores a humo comenzaron a invadir las viviendas. Compartiendo a través de WhatsApp, los vecinos comenzaron a reportar sobre un incendio que se iniciaba en las colinas justo después de la medianoche del Día de Año Nuevo.

A pesar de que los bomberos controlaron rápidamente el fuego inicial, la inquietud entre los residentes se intensificó cuando el 7 de enero un miembro del grupo vecinal alertó sobre un "olor a fuego". Otros notaron el mismo aroma, sospechando que podría ser residuo del incendio anterior. Pronto, se divisaron plumas de humo oscuro ascendiendo, lo que llevó a un vecino a exclamarse: "¡Es el mismo lugar!".

Expertos, como Scott Sweetow, un agente retirado de la ATF, están revisando la posibilidad de que restos del fuego anterior se hayan reavivado. Además, se están analizando las causas, que pueden incluir la caída de cables eléctricos debido a vientos fuertes. La preocupación crece en torno al uso de fuegos artificiales para celebrar el Año Nuevo, que generó temores sobre el inicio de incendios en un área ya susceptible.

Expertos en incendios han señalado que "los eventos catastróficos pueden tener sus raíces en incendios previos, especialmente si las condiciones climáticas permanecen secas". Es posible que residuos de un incendio anterior se hayan encendido, causando una nueva ignición. Jacob Bendix, profesor de geografía y medio ambiente, añade que aunque el paso del tiempo disminuye la probabilidad de reencendido, los antecedentes de sequía en la región complican aún más la situación.

Sin embargo, mientras los incendios parecen estar cediendo, las autoridades enfrentan la amenaza de saqueos en las áreas afectadas. La alerta roja por incendios ha sido levantada en muchos condados, pero las advertencias sobre los vientos fuertes persisten, dejando a la comunidad en un estado de alta alerta. La tragedia avanza y la comunidad se une para enfrentar las consecuencias de este devastador desastre.