El Superclásico entre Colo-Colo y Universidad de Chile se prepara para una jornada segura

A tan solo un día del esperado Superclásico entre Colo-Colo y Universidad de Chile, las autoridades realizaron un exhaustivo recorrido por las instalaciones del Estadio Monumental para confirmar las estrictas medidas de seguridad.

Este evento deportivo genera gran expectativa, especialmente tras la tragedia ocurrida en abril, donde dos jóvenes hinchas de Colo-Colo perdieron la vida. Este será el primer partido con aforo completo de 42 mil personas desde aquel fatídico encuentro con Fortaleza.

Autoridades y dirigentes hacen un llamado a la calma

Aníbal Mosa, presidente de Blanco y Negro, hizo énfasis en la importancia de vivir una experiencia únicamente deportiva. "Espero que todo se centre en el juego y en el ambiente de festividad". Mosa también pidió a la hinchada que apoyen el evento y lo disfruten sin alteraciones.

El delegado presidencial de la Región Metropolitana, Gonzalo Durán, destacó que la situación en el club ha sido controlada, aunque hubo dos detenidos afuera del estadio por portar cuchillos y se detectaron fuegos artificiales no autorizados.

Medidas de seguridad excepcionales

El partido fue clasificado como Clase A, lo que implica una prohibición total de la venta de alcohol en el recinto. Además, se implementará un radio de seguridad de cinco cuadras, habrá desvíos de tránsito desde las 10:00 a.m. hasta las 6:00 p.m., y el estadio abrirá sus puertas tres horas antes del encuentro.

Se han contratado 500 guardias de seguridad privada, se instalarán 64 detectores de metales y se utilizarán sistemas avanzados de monitoreo, incluyendo cámaras y control biométrico. Todo está preparado para una gran fiesta deportiva.

Cuatro anillos de seguridad aseguran el orden público

El subsecretario de Seguridad Pública, Rafael Collado, anunció que se establecerán cuatro anillos de seguridad para mantener el orden en el Superclásico, aunque evitó revelar el número exacto de fuerzas del orden presentes, justificando que es una medida de seguridad especial.

Con el compromiso y la responsabilidad de la hinchada, se espera que esta celebración del fútbol sea recordada como un gran evento deportivo sin incidentes.