René Jiménez Molina ha sido declarado culpable del femicidio de su esposa, Estela Vega Estuardo, de 57 años, quien fue asesinada en diciembre de 2022 en Coronel, Región del Bío Bío.

Este terrible crimen ha dejado a la comunidad conmocionada. Según las autoridades, el hombre intentó encubrir su acto atroz mediante una falsa denuncia de desaparición, alegando no saber el paradero de su esposa. Sin embargo, el cuerpo de Estela fue encontrado oculto en el interior de su hogar, entre una pared y un armario, lo que reveló la verdadera naturaleza de sus acciones.

La investigación determinó que Estela presentaba signos de asfixia y numerosas lesiones en la cabeza, un claro indicio de la brutalidad del ataque. El asesino envolvió su cuerpo en papel de aluminio y bolsas plásticas, mostrando una frialdad escalofriante.

Durante los días previos al macabro hallazgo, Jiménez negó repetidamente cualquier conocimiento sobre la desaparición de su esposa, incluso realizó declaraciones ante los medios locales y Carabineros, todo con el fin de desviar las sospechas sobre su culpabilidad.

La fiscal de Coronel, Carolina Somorrostro, descartó que el acusado tuviera alguna colaboración significativa con la investigación, señalando las maniobras engañosas que utilizó, como enviarse mensajes a sí mismo desde el teléfono de la víctima, en un intento desesperado por crear una coartada.

Jiménez, de 56 años, permanece en prisión preventiva y enfrenta una pena de cadena perpetua simple o calificada. La Delegación Presidencial y el Servicio de la Mujer y Equidad de Género en Bío Bío están exigiendo la máxima sentencia, lo que refleja el rechazo social a la violencia de género en el país.

Este espeluznante caso ha reabierto el debate sobre la violencia intrafamiliar en Chile, y se espera que continúe generando repercusiones en la sociedad y entre las autoridades en la lucha por la equidad de género. ¿Qué medidas se tomarán ahora? La comunidad exige respuestas inmediatas y efectivas para prevenir estos actos atroces en el futuro.