En una desgarradora experiencia, el nadador paralímpico Alberto Abarza sufrió un violento portonazo cuando se dirigía a dejar a su hija en la casa de su expareja en Maipú, Región Metropolitana. Este lamentable hecho no solo puso en peligro su vida y la de su hija, sino que también resultó en el robo de su silla de ruedas adaptada, un equipo esencial y de valor tanto económico como sentimental para él.

El alcalde de la comuna, Tomás Vodanovic, compartió la noticia a través de su cuenta en X, destacando la gravedad del asalto. "Quiero informar que ayer fue asaltado nuestro medallista olímpico y vecino Alberto Abarza. Entre las cosas que le robaron se encuentra su silla, que tiene un valor muy importante para él, ya que está equipada con amortiguadores y luces rojas", explicó el alcalde, haciendo un llamado a la comunidad para que, en caso de tener información sobre el paradero de la silla, se comunique con Carabineros.

Abarza, visiblemente afectado, relató: "Fue terrible porque estaba con mi hija en ese momento y nos apuntaron con armas de fuego". La situación evidenció la barbaridad del crimen, que impactó no solo a la familia, sino también a la comunidad deportiva y a la población en general.

Lamentablemente, este tipo de asaltos se han vuelto más comunes en diversas localidades de Chile, lo que genera preocupación entre los habitantes. Las autoridades están instando a la ciudadanía a estar alerta y reportar cualquier actividad sospechosa para combatir este tipo de delincuencia.

"Lo material, como la camioneta, se puede recuperar, pero la silla de ruedas es algo que no puede reemplazarse fácilmente", lamentó el atleta, quien ha sido un símbolo de perseverancia y superación en el deporte. La comunidad se ha movilizado en redes sociales, expresando su apoyo y difundiendo información en la búsqueda de la silla robada.