En un giro inesperado, Huawei se ve obligada a reinventarse después de ser bloqueada por el Departamento de Comercio de Estados Unidos, lo que le ha costado sus licencias de Windows y Google. La gigante tecnológica china no puede fabricar nuevos portátiles con Windows, pero tiene un as bajo la manga.

Huawei y la pérdida de Windows

Desde la prohibición, Huawei puede seguir comercializando dispositivos Windows ya existentes, pero cualquier nuevo modelo queda a merced de restricciones severas. Esta situación no solo afecta su capacidad de producción, sino que también limita su alcance en el competido mercado europeo.

El plan de acción de Huawei: HarmonyOS

Con la licencia de Microsoft en la cuerda floja, Huawei está moviendo piezas para darle un nuevo rumbo a su software. Richard Yu, CEO de Huawei, ha adelantado que muy pronto, la compañía lanzará portátiles con su propio sistema operativo, HarmonyOS. Esta apuesta busca crear un ecosistema interconectado que abarque desde PCs hasta vehículos eléctricos.

¿La revolución de HarmonyOS?

HarmonyOS Next es la respuesta de Huawei, un sistema que no dependerá de Android o Linux, con un núcleo completamente propio. Esta ambiciosa propuesta está diseñada para ofrecer una experiencia integral a sus usuarios y comenzará a materializarse en 2024 con los nuevos modelos en China.

Linux, el salvador inesperado

Mientras tanto, Huawei no se queda de brazos cruzados. Recientemente, lanzó el Huawei Mate X Pro, disponible en versiones 14 y 16, funcionando con Linux y un poderoso Intel Core Ultra 7. Este dispositivo, que antes se ofrecía con Windows, marca un hito en la estrategia de la compañía.

El dilema en Europa: atender a un mercado complicado

Sin embargo, la llegada de Linux a Europa podría enfrentar desafíos. Con una cuota de mercado de apenas 3.4%, la aceptación de dispositivos basados en Linux parece complicada. Huawei ya sufrió un golpe al perder acceso a los servicios de Google en su gama de smartphones, y sus portátiles podrían enfrentar un destino similar a menos que logren captar el interés de los consumidores.

Mientras se prepara para el futuro, la pregunta que persiste es: ¿será suficiente la innovación de Huawei para recuperar su posición en el mercado global?