Los estudiantes y pasantes de Medicina están enfrentando una dura realidad al comparar sus becas con las asignaciones del programa "Jóvenes Construyendo el Futuro", que ofrece una compensación significativamente mayor.

Javier Adalberto Alatorre Vega y Nydia Flores, estudiantes de Medicina en la Universidad de Sonora, realizan su servicio social en municipios rurales donde, pese a recibir becas federales, estos fondos no bastan para cubrir sus gastos esenciales.

Nydia, por ejemplo, trabaja en el Centro de Salud de Naco y actualmente recibe una beca de solo 3,900 pesos al mes, un monto que, en ocasiones, apenas le permite costear la gasolina para visitar a su familia en Hermosillo. "Este dinero sí nos ayuda, pero desearíamos recibir más, dado que estamos lejos de casa y debemos financiar nuestras necesidades durante el servicio social", indicó.

Nydia complementa sus ingresos con el apoyo económico de su familia, ya que su servicio social implica vivir en el centro de salud, donde trabaja ocho horas diarias, seis días a la semana, hasta el 31 de julio. Por su parte, Javier Alatorre comenzó su servicio social el 1 de agosto en San Ignacio Río Muerto, con una beca de 2,500 pesos mensuales, monto que considera insuficiente para cubrir todos sus gastos.

Ambos jóvenes se sienten frustrados al notar que reciben menos apoyo financiero que los beneficiarios del programa "Jóvenes Construyendo el Futuro", quienes perciben más de 8,000 pesos al mes. Esta injusticia ha suscitado un debate en la comunidad médica sobre los niveles de compensación para quienes arriesgan y dedican su tiempo al servicio social en contextos críticos.

En un intento por mejorar esta situación, la Secretaría de Salud federal ha anunciado que, a partir del 1 de mayo de 2024, los montos de las becas mensuales para médicos internos de pregrado y pasantes de servicio social se duplicarán, pasando de 2,309 a 4,620 pesos. Esto es un paso en la dirección correcta, pero muchos todavía cuestionan si será suficiente para cubrir la demanda y necesidades de todos los pasantes.

Los médicos internos de pregrado, que son estudiantes en su quinto año realizando prácticas en unidades de salud en áreas vulnerables, recibirán compensaciones que varían según la categoría de la plaza asignada, que van de tipo A en zonas urbanas con seis horas diarias, hasta las de tipo CC en áreas de alta marginación, con jornadas de ocho horas.

Aunque los detalles precisos de las becas para cada categoría aún no se han hecho públicos, es conocido que los pasantes en plazas tipo "CC" reciben un apoyo mensual de 3,576 pesos.

Esta situación no solo representa un desafío económico para los estudiantes, sino que también podría influir en la calidad del cuidado de la salud en regiones que ya enfrentan numerosas limitaciones. Meganoticias ha solicitado más información a la Secretaría de Salud de Sonora y al IMSS sobre el número total de estudiantes de Medicina en práctica, pero hasta ahora no ha recibido respuesta. ¡Es hora de que se escuche la voz de estos futuros médicos y se valore su compromiso!