La próxima semana se reanudan las Eliminatorias Sudamericanas rumbo al Mundial 2026, una travesía llena de obstáculos para la selección chilena, que actualmente se encuentra en la última posición de la tabla. Enfrentarán a Perú en Lima y luego a Venezuela en Santiago, partidos que son cruciales para la era del director técnico Ricardo Gareca, quien busca su primera clasificación a un Mundial al frente de La Roja.

En medio de esta complicada situación, la Federación Internacional de Fútbol Asociado (FIFA) ha decidido castigar a la Federación de Fútbol de Chile (FFCh), provocando un gran impacto económico para el organismo, lo que ha generado una ola de críticas y preocupación entre los aficionados.

Este jueves, la Comisión Disciplinaria de la FIFA hizo públicas las sanciones que afectaron a varias selecciones por incidentes ocurridos entre septiembre y octubre. En particular, el castigo a Chile se debe a la mala conducta del equipo durante su última cita eliminatoria, donde cayeron derrotados 4-0 ante Colombia en Barranquilla el 15 de octubre. La causa principal fue el retraso en el inicio del partido, lo que infringe el Artículo 14 del Código Disciplinario de FIFA sobre la conducta inapropiada.

La sanción, que asciende a 10 mil francos suizos (casi 11.500 dólares), se suma a una serie de multas y advertencias recibidas por el equipo en el último tiempo. Esto significa que la FFCh ahora enfrenta la presión no solo de obtener buenos resultados en la cancha, sino también de lidiar con las consecuencias financieras de sus errores.

Colombia también fue sancionada por el mismo motivo en el mismo encuentro, mientras que Argentina, que también sufrió retrasos en un partido contra Venezuela, solo recibió una advertencia, lo que ha generado críticas sobre la consistencia de las decisiones tomadas por la FIFA.

Entre las sanciones más severas se encuentra la impuesta a Colombia, quien no solo fue multada por el retraso en el partido contra Chile, sino que también recibió una sanción por discriminación por parte de ciertos aficionados durante su partido contra Argentina, donde se les cerraron el 25% de las localidades y una multa de 60 mil francos suizos.

A pesar de las controversias, nuestras selecciones siguen su camino. La selección chilena ha acumulado multas en este proceso clasificatorio, que incluyen una reducción del 50% en el aforo para un partido en casa contra Bolivia, que se debió a comportamientos discriminatorios de los hinchas y a otros retrasos. En total, la ANFP tuvo que desembolsar 80 mil francos suizos (más de 90 mil dólares) en sanciones.

En el ámbito deportivo, la situación se vuelve más compleja, ya que el mediocampista Williams Alarcón, figura destacada de Huracán, sufrió una lesión que pone en duda su participación en los próximos encuentros contra Perú y Venezuela. Este no es el primer revés para Gareca, quien en meses anteriores debió lidiar con la ausencia de jugadores clave, lo que dificultó su trabajo con la selección.

La presión para el equipo chileno aumenta y cada partido se convierte en una final. La afición espera que esta vez puedan superar sus adversidades, tanto en lo deportivo como en lo económico. El tiempo se está agotando para que Chile recupere su lugar en el fútbol mundial.