La exministra Marcela Cubillos vuelve a estar en el centro de la controversia tras la revelación de su sueldo de $17 millones brutos en la Universidad San Sebastián. Este hecho no solo ha generado un aluvión de críticas, sino que también ha abierto un candente debate sobre las altísimas remuneraciones en el sector de la educación privada.

Osvaldo Corrales, rector de la Universidad de Valparaíso y presidente del Consorcio de Universidades del Estado de Chile (Cuech), calificó el salario de Cubillos como "completamente atípico". Corrales enfatizó que es incomprensible que un académico sin funciones de dirección o participación en grandes proyectos obtenga compensaciones tan desmesuradas.

El rector también hizo hincapié en que esta situación es reflejo de la evolución del sistema de educación superior en Chile, donde prevalece un sistema privado que, aunque accede a recursos públicos, no está regulado como corresponde. "Las universidades estatales, por el contrario, estamos sujetas a múltiples regulaciones, incluyendo la ley de transparencia."

Sorprendentemente, Corrales destacó que la Universidad San Sebastián ha reportado ingresos de $37 mil millones en becas estatales, una cifra similar a la que recibe la Universidad de Valparaíso por concepto de gratuidad, lo que implica que los recursos de todos los chilenos están respaldando estas exorbitantes remuneraciones.

El rector ha reclamado repetidamente por la necesidad de más regulaciones en el sector, advirtiendo que la gratuidad implementada no ha sido acompañada de un debate robusto sobre las normativas que rigen el sistema educativo. "Es fundamental que todas las instituciones que manejan dinero público se rijan bajo normas similares y rigurosos controles", enfatizó.

Corrales también se refirió a la contradicción existente entre el régimen jurídico de las instituciones educativas y el financiamiento que reciben. Señaló que el debate sobre quiénes deben recibir recursos públicos ha sido distorsionado por ciertos actores políticos que cambian su postura según les convenga.

La gran incógnita que queda en el aire es si sueldos similares podrían estar sucediendo en otras universidades privadas. "El problema es que no tenemos forma de saberlo. Lo que ocurre en estas instituciones sigue siendo un misterio", concluyó Corrales.

Este escándalo parece iluminar una profunda crisis en la educación superior en Chile, marcada por la falta de transparencia y regulación. Los ciudadanos esperan que las autoridades tomen medidas que aseguren un uso eficiente y justo de los recursos públicos en el ámbito educativo. ¡No te pierdas las próximas noticias sobre este tema candente!