En un tenso episodio del programa ‘Sígueme’, Daniela Aránguiz se encontró atrapada en un mar de rumores y comentarios sobre Maite Orsini, donde su silencio fue mucho más ruidoso que las palabras de sus compañeros. Durante 47 minutos, la panelista luchó por mantenerse callada mientras sus colegas discutían sobre la diputada, quien se ha convertido en el centro de varios escándalos en la farándula chilena y de la cual ahora Aránguiz se siente completamente atada debido a una demanda de la expareja de Jorge Valdivia.

A pesar de su expresión stoica, la tensión era palpable. Ella intentó mantener su compostura a medida que sus compañeros hablaban, pero el juego emocional de Aránguiz no pasó desapercibido. Intentando contenerse, comenzó a arreglarse el cabello y a hacer muecas, dejando claro que sus pensamientos estaban lejos de la calma.

El ambiente se tornó aún más incómodo cuando el conductor Michael Roldán sugirió que si Daniela regresara con Jorge Valdivia, esto podría llevar a nuevas complicaciones para la diputada, insinuando que podría requerir otra licencia médica. Sin embargo, el telón de silencio que la rodeaba no era fácil de romper.

Daniela, fiel a su estilo impulsivo, vivió un momento de quiebre cuando el tema cambió hacia los elogios que Mario Velasco, ex pareja de Maite Orsini, hizo sobre la diputada. A medida que Carla Ballero leía las palabras de Velasco, destacando la inteligencia de Maite como un atractivo, Aránguiz no pudo contenerse más y gritó: “¡Qué inteligente!” El resto del panel se sorprendió, y la animadora Julia Vial le recordó rápidamente su situación legal que le impide hablar sobre Orsini hasta dentro de un año y medio.

Reconociendo que estaba al borde de permitir que su lengua hablara más que su razón, Daniela hizo lo inesperado: se levantó y se retiró del estudio. “Me voy a parar porque necesito salir de este lugar un rato. Si no, me voy a condorear”, exclamó, dejando a todos boquiabiertos.

Este episodio ha desatado una ola de comentarios en las redes sociales, donde los fanáticos se preguntan cuánto tiempo podrá la polémica panelista seguir guardando silencio. Sin duda, la tensión que vive Daniela Aránguiz no solo se reafirma en los sets de televisión, sino también en el ojo público, donde sus seguidores ansían cada vez más su regreso al debate sobre la farándula. La pregunta es: ¿qué hará Daniela cuando finalmente se levante la mordaza? ¡Estén atentos!