La visita de Boca Juniors al estadio Marcelo Bielsa se convirtió en un verdadero caos y un dolor de cabeza para el equipo ‘Xeneize’, que terminó sufriendo una derrota por 2 a 0 ante Newell’s Old Boys. Sin embargo, lo que sucedió antes del encuentro fue aún más alarmante.

El ambiente se tornó hostil cuando un supuesto ‘hincha’ lanzó trozos de vidrio hacia los arqueros de Boca Juniors, impactando de manera brutal en el cuello del portero suplente, Leandro Brey. Este violento acto dejó a todos atónitos, poniendo en riesgo la seguridad no solo del jugador, sino también de otros presentes en el estadio.

Además de este acto de violencia, los hinchas de Newell’s también arrojaron bombas de estruendo y latas que cayeron peligrosamente cerca de los jugadores visitantes durante el calentamiento. Este clima tenso obligó a retrasar el inicio del partido varios minutos.

Cuando finalmente comenzó el juego, los locales se adelantaron rápidamente en el marcador gracias a un gol de Luciano Herrera en el minuto 5. Luego, en un primer tiempo marcado por la intensidad, Luciano Lollo selló la victoria definitiva con un gol en el tiempo añadido del primer tiempo, dejando un marcador de 2 a 0.

Para añadir más drama, la ausencia de los jugadores chilenos Carlos Palacios, criticado por sus últimas actuaciones, y Williams Alarcón, quien se encontraba fuera por lesión, hizo que el partido careciera de representación chilena, un hecho sin duda significativo.

Este ataque indiscriminado levanta serias preguntas sobre la seguridad en los estadios argentinos y la conducta de los hinchas. Se espera que las autoridades tomen medidas contundentes para prevenir que incidentes de este tipo se repitan en el futuro. ¡El fútbol no debería ser un campo de batalla!