El temperamento de Darío Osorio volvió a jugarle una mala pasada en la liga danesa, y esta vez con consecuencias significativas. En un crucial partido entre el Midtjylland y Randers, Osorio fue expulsado en el minuto 65, dejando a su equipo con un jugador menos en un momento donde buscaban con desesperación el empate.

El incidente ocurrió cuando Osorio, quien formó parte de la Universidad de Chile, perdió la posesión del balón ante Florian Danho. En un arranque de frustración, Osorio cometió una falta brutal, que inicialmente fue sancionada solo con una tarjeta amarilla por el árbitro. Sin embargo, el VAR intercedió, señalando la gravedad de la acción, y el árbitro rectificó su decisión, mostrando la roja al chileno, lo que desató la incredulidad en la afición.

La pregunta que muchos se hicieron es: ¿qué estaba pensando el seleccionado chileno en ese momento? Aunque su equipo era el favorito en la liga, comenzaron en desventaja tras un gol temprano de Norman Campbell para Randers en el minuto 16. Curiosamente, el Midtjylland logró empatar gracias a Franculino Djú en el minuto 19, pero la presión fue nuevamente sobre ellos cuando Simen Bolkan anotó para los locales antes del descanso, poniendo el marcador 2-1 en contra.

Con su equipo necesitando urgentemente el empate para no perder el primer lugar de la tabla, la expulsión de Osorio fue un golpe devastador. A pesar de la adversidad, el Midtjylland mostró coraje y logró igualar en el tiempo de descuento, con un gol de penalti de Aral Simsir en el minuto 91, manteniéndose al frente de la liga con 21 puntos.

Sin embargo, este no es un incidente aislado para Osorio. Este año, en la fase previa de la Champions League, también estuvo al borde de ser expulsado después de recibir una tarjeta amarilla y entrar en una acalorada discusión con un rival, lo que llevó a su entrenador, Thomas Thomasberg, a sustituirlo antes de que la situación se volviera insostenible.

El técnico comentó: 'Debemos ser conscientes de estas situaciones. No podemos permitirnos estar en situaciones donde un jugador puede arriesgar todo por una reacción impulsiva. Darío necesita aprender a manejar sus emociones, especialmente cuando siente que las decisiones son injustas. Es fundamental para el equipo'.

Con este nuevo incidente, los aficionados se preguntan: ¿podrá Osorio controlar su temperamento en futuros partidos y ayudar a su equipo a mantener la ventaja en la liga? La presión ahora recae sobre él para demostrar que puede ser una columna vertebral del Midtjylland sin caer en las provocaciones del juego.