Una controvertida imagen del presidente Gustavo Petro junto a una joven del M-19 que sostiene un arma ha vuelto a resurgir en el debate público colombiano. Esta fotografía, que circula en redes sociales desde hace más de diez años, fue reavivada por la senadora María Fernanda Cabal y otros críticos del gobierno. En un intento por defenderse, Petro publicó dos versiones de dicha imagen, una que él asegura es original y otra que señala como manipulada.

"Esta foto muestra la manipulación que las redes de extrema derecha realizan para socavar un proyecto político progresista y la imagen de las personas involucradas", argumentó Petro en su cuenta de X, defendiendo así su reputación y la del contexto en el que se tomó la fotografía. Se recordó que la imagen fue capturada en un evento histórico en la casa de la paz de Zipaquirá, posterior a la manifestación del candidato presidencial Carlos Pizarro, quien fue asesinado días después.

El presidente hizo un llamado a la senadora Cabal para que se retracte de sus publicaciones, enfatizando que las imágenes han sido manipuladas con fines políticos. Claudia Alarcón, la mujer en la foto, también defendió a Petro durante una entrevista, aseverando que aunque la imagen es real, el arma no lo es, y describió cualquier alteración como un montaje.

Sin embargo, esto no detuvo la controversia. Varios análisis de medios, incluyendo una investigación de La Silla Vacía y el sitio especializado Bellingcat, han señalado que la imagen considerada "original" por Petro también presenta elementos retocados. Esto avivó las críticas hacia el mandatario, quien es acusado de mentir al intentar desmentir la imagen.

Además, BioBioChile realizó una comparación de las imágenes y presentó evidencias de alteraciones, incluyendo marcas difusas en la camisa de la mujer y puntos de perspectiva que no coinciden, lo que genera aún más interrogantes sobre la autenticidad de la imagen.

Este tema no solo toca la controversia política actual, sino que también mantiene viva la discusión sobre el pasado guerrillero de Petro y su relación con el M-19, un grupo que intentó hacer la transición de la lucha armada a la política. La foto, que fue tomada en un acto de reconciliación, ahora se convierte en un símbolo de las tensiones políticas que persisten en Colombia. El legado del M-19, que marcó un capítulo esencial en la historia del país, continúa siendo motivo de debate y reflexión en la actualidad, poniendo en el centro de la conversación la dicotomía entre el pasado violento y el presente político del presidente Petro.