¡Un Encuentro que No Fue!

El intento de Javier Milei de reunirse con Donald Trump ha desatado una serie de controversias que sacudieron los titulares. Lo que se suponía sería una reunión significativa terminó en un fiasco, y las teorías sobre lo que realmente sucedió comienzan a cobrar fuerza.

Una Gala y Muchos Problemas

El 3 de abril, el presidente argentino se dirigió a los Estados Unidos acompañado de su secretaria y del ministro de Economía, Luis Caputo, con el propósito de asistir a una gala donde recibiría el prestigioso premio 'American Patriot'. Sin embargo, la gran sorpresa fue la ausencia de Trump, quien, según se informó, enfrentó un "problema técnico" con su avión.

A pesar de la falta de Trump, las redes sociales no tardaron en llenar el vacío con imágenes del expresidente en la ceremonia, lo que aumentó la confusión sobre la situación.

¿Descoordinación Fatal?

Mientras los rumores sobre una descoordinación o incluso un desaire comenzaron a surgir, informes comenzaron a señalar que el culpable de este fiasco podría ser el canciller argentino, Gerardo Werthein.

La Ira del Canciller

Según Glenn Parada, uno de los organizadores de la gala, todo estaba listo para que Milei y Trump se encontraran. "Solo debían esperar 15 o 20 minutos. Pero se fueron sin avisar. Nadie sabe por qué decidieron irse", comentó Parada.

El desenlace fue claro: apenas 15 minutos después de la partida de la delegación argentina, Trump llegó al evento. La irritación del canciller se hizo evidente; "estaba muy enojado, se le notaba molesto, e incluso se fue a los gritos", reveló Parada.

Un Desastre Diplomático

La disputa entre Milei y su canciller podría tener repercusiones más allá del aparente fracaso personal. La imagen de Argentina en el panorama internacional pende de un hilo tras este escándalo que podría haber sido evitado.

La comunidad política y los ciudadanos están a la expectativa de lo que esto significa para las relaciones entre Argentina y Estados Unidos. ¿Podrá Milei recuperarse de este traspié diplomático? Solo el tiempo lo dirá.