Elon Musk, el magnate detrás de SpaceX y Tesla y actual líder del Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE) de EE. UU., no se contuvo esta semana al referirse a Peter Navarro, un economista y asesor de Donald Trump, llamándolo ‘imbécil’ y ‘tonto de remate’.

El enfrentamiento se desató a través de la red social X, plataforma que Musk posee. La controversia comenzó cuando Navarro, quien cuenta con un doctorado en Economía por Harvard, criticó a Musk durante una entrevista con NBC, sugiriendo que el CEO de Tesla prefiere utilizar 'piezas extranjeras baratas' para la producción de sus automóviles, afirmando que este enfoque es perjudicial para la economía y la seguridad nacional.

Musk no tardó en responder, asegurando que las afirmaciones de Navarro son ‘demostrablemente falsas’. En su defensa, el multimillonario enfatizó que la mayoría de los autos de Tesla son fabricados en EE. UU. ‘Según cualquier definición, Tesla es el fabricante de automóviles más verticalmente integrado de Estados Unidos, con el mayor porcentaje de contenido estadounidense’, añadió en una publicación posterior en la misma plataforma.

Además, Musk provocó risas al cambiar el nombre del asesor en un post a 'Peter Retarrdo', un juego de palabras que generó una ola de reacciones entre sus seguidores.

No es la primera vez que Navarro critica a Musk. Tras los comentarios de Musk sobre eliminar todos los aranceles con la Unión Europea, Navarro señaló que el empresario simplemente busca proteger sus propios intereses, un movimiento que, según él, sería normal para cualquier negocio.

Este enfrentamiento pone de manifiesto las tensiones en las altas esferas empresariales y políticas de EE. UU., donde las diferencias sobre políticas económicas pueden desencadenar respuestas apasionadas. ¿Qué opinan los seguidores de Musk sobre las palabras de Navarro? ¿Se cruzará la línea entre la política y los intereses personales en el futuro? ¡El drama apenas comienza!