Huelva - La medicina es mucho más que un simple acto de curación, y así lo define Elena Uceda, médica del hospital Vázquez Díaz de Huelva, quien recientemente fue galardonada con el prestigioso premio Gertrude Vanderbilt Whitney a la Mujer Onubense en Salud. Este premio reconoce su dedicación a los cuidados paliativos durante más de 30 años, donde ha demostrado que su labor va mucho más allá de lo médico.

Elena Uceda es una pionera en el campo de los cuidados paliativos, una disciplina que ha evolucionado notablemente en España en las últimas décadas, a pesar de los desafíos iniciales que enfrentó. A través de sus palabras, enfatiza la importancia de la humanización en la atención médica: "Cuando la curación no es posible, aún hay mucho que hacer para garantizar que los pacientes vivan sus últimos días con dignidad y apoyo".

Originaria de una familia médica, Elena descubrió su vocación en el Hospital Municipal de Morón y continuó su formación en Huelva, donde trabajó con reconocidos especialistas. En 2001, se unió a la Asociación Española Contra el Cáncer, donde ayudó a establecer la Unidad Domiciliaria Rural de Cuidados Paliativos. Con una sólida formación en Medicina Familiar y Comunitaria, actualmente es la coordinadora del Grupo de Trabajo de Dolor y Cuidados Paliativos de la Sociedad Andaluza de Medicina Familiar y Comunitaria (SAMFyC), donde imparte conocimientos valiosos a futuros médicos.

Su experiencia le ha proporcionado innumerables enseñanzas. Elena destaca que la capacidad de los pacientes para aceptar su situación y expresar cómo desean vivir sus últimos días es uno de los mayores regalos que le ha dado su profesión. Recuerda con cariño a Mariana Valle, una paciente que, tras enfrentar múltiples intervenciones, recibió sus cuidados paliativos. Su marido, Ernesto, relató conmovedoramente cómo en los momentos finales, Elena estuvo presente y recomendó poner música para confortar a Mariana, subrayando el impacto que su atención tuvo en ellos.

Uceda también aboga por la importancia del trabajo en equipo en los cuidados paliativos, donde médicos, enfermeros, trabajadores sociales, y psicólogos juegan un papel esencial, además del apoyo familiar. "Sin un equipo comprometido, nuestra labor no sería posible", afirma con determinación.

Al cerrar la conversación, Elena comparte su gratitud por su trabajo, que cada día le recuerda el significado de vivir y disfrutar de cada momento. Su dedicación y compasión lo convierten no solo en un ejemplo a seguir, sino en un verdadero faro de esperanza para muchas familias en situaciones críticas. Sin duda, Elena Uceda es un tesoro para la comunidad de Huelva y un referente en la medicina paliativa en España.