Las elecciones en la Universidad Nacional de La Plata (UNLP) están a la vuelta de la esquina, y los estudiantes de las 17 facultades se preparan para votar entre un total de 101 listas que competirán por los Centros de Estudiantes y los consejos directivos. El clima es de expectativa, y todos los ojos están puestos en las facultades de Medicina y Psicología, donde la tradición política podría verse desafiada.

Las listas libertarias, como Crear+Libertad y Universitarios de La Libertad Avanza, están listas para incursionar en Económicas, un centro tradicionalmente dominado por Franja Morada. Este último ha mantenido una posición hegemónica durante años, pero la llegada de nuevas fuerzas podría significar un cambio en el horizonte.

En Medicina, el grupo Viento de Abajo (La Mella) ha tenido un éxito reciente, despojando a Remediar (Juventud Universitaria Peronista-JUP) del poder. La diferencia fue por poco más de mil votos, lo que sugiere que las elecciones en esta facultad serán extremadamente reñidas, ya que muchos coinciden en que Medicina tiende a ser un bastión hostil para las fuerzas oficialistas.

La facultad de Psicología, que también sigue siendo un campo de batalla, está bajo el mando de Franja Morada, pero la competencia se intensifica con la participación de La Jauretche (JUP) y un frente respaldado por el Miles, lo que promete hacer que el conteo de votos sea más tenso, especialmente después de una elección pasada en la que el reformismo ganó por un estrecho margen de menos de 200 votos.

Además, los peronistas de La Jauretche buscan reafirmar su control en Humanidades, el único centro que lideran, habiendo desplazado recientemente a Aule (La Mella). Aunque el panorama electoral muestra signos de una posible recesión del peronismo y la izquierda en la UNLP, ambas tendencias están decididas a hacer sentir su influencia, buscando captar la atención de un electorado que, en ocasiones, parece desilusionado.

Franja Morada, además de concentrar su fuerza en Medicina y Psicología, también mantiene el control en varias facultades como Informática, Derecho, Arquitectura e Ingeniería. El reto será preservar los 10 centros de las 17 facultades en las que ejercen control, aunque este año no competirán en Odontología, Trabajo Social ni Naturales.

Un aspecto que no debe pasarse por alto es la ruptura entre La Cámpora y el Miles en la facultad de Artes, donde hasta el año pasado habían trabajado en conjunto. Este cambio añade una capa de complejidad a la ya complicada escena política universitaria. La Cámpora, que ha perdido terreno, buscará refugio en Periodismo, un área históricamente dominada por la agrupación Rodolfo Walsh.

En Naturales y Trabajo Social, el Frente Natural y una alianza conformada por el Miles, respectivamente, mantienen una representación que se alinea con el peronismo, mientras que el Centro de Odontología sigue bajo la conducción del MOI, un grupo que se presenta como independiente.

Un último dato de relevancia es que, salvo excepciones como Franja Morada y el MOI, la mayoría de las agrupaciones mencionadas forman parte de la Federación Universitaria de La Plata (FULP), actualmente presidida por La Mella y la JUP. Este año, la JUP ha recuperado su representación en este organismo, que también involucra a La Cámpora y al Miles, entre otras expresiones políticas.

Lo que está en juego no es solo el control de centros y facultades: también será un termómetro importante para medir las tendencias políticas nacionales, ya que en menos de dos años se elegirán decanos y el nuevo presidente de la UNLP. La importancia de estas elecciones va más allá de la UNLP, en un momento en el que el país atraviesa profundas transformaciones políticas y sociales.