Tecnología

¡El Gran Engaño del Hidrógeno! ¿Podríamos Nunca Producirlo Eficazmente?

2025-01-20

Autor: Lucas

La transición hacia energías limpias ha puesto al hidrógeno en el centro de atención como uno de los combustibles del futuro. Pero, lamentablemente, el mundo está enfrentando una desilusión monumental. La posibilidad de producir hidrógeno, incluso después de increíbles descubrimientos en su estado natural, se está mostrando más complicada de lo esperado.

El hidrógeno verde, proveniente de fuentes renovables, es considerado clave para descarbonizar sectores difíciles de abordar, como el transporte marítimo, la industria pesada y ciertos procesos químicos. Sin embargo, a pesar de ser una opción atractiva en la lucha contra el cambio climático, el camino hacia su producción masiva enfrenta severos desafíos.

Un informe de la Agencia Internacional de la Energía (AIE) resalta que, a pesar de su gran potencial, el hidrógeno debe integrarse en sectores que todavía dependen de combustibles fósiles, como el transporte y la generación de energía. Pero el panorama es oscuro: poco más del 2% del consumo energético en Europa en 2022 fue hidrógeno verde, muchas veces creado a partir de gas natural.

Además, la sequía se plantea como un obstáculo significativo. En Estados Unidos, el 20% de los proyectos relacionados con hidrógeno renovable están en áreas con escasez de agua. En España, la situación es igualmente preocupante: la mitad de los proyectos de hidrógeno se sitúan en regiones con estrés hídrico.

¿La solución? África tiene un potencial increíble con capacidades para generar hasta 50 millones de toneladas de hidrógeno verde al año, pero su desarrollo puede verse igualmente afectado por la disponibilidad de agua. La crisis del agua es una realidad que puede magnificarse en los próximos años; se estima que para 2050, la sequía afectará a tres cuartas partes de la población mundial.

En la planta de hidrógeno ubicada en el desierto de Sonora, Arizona, se ha evidenciado cómo el cambio climático impacta la producción. Aunque utiliza energías renovables para operar, depende de una fuente de agua subterránea, lo que plantea dudas sobre su sostenibilidad. Sin un enfoque en restaurar las fuentes de agua, esta planta podría acabar consumiendo hasta 1.200 millones de litros, lo que es insostenible a largo plazo.

La lucha por un futuro energético más limpio se está viendo comprometida no sólo por la tecnología necesaria, sino también por los recursos hídricos limitados. En poco tiempo, podría quedarnos solo con las promesas del hidrógeno, sin la capacidad real de implementarlo en nuestras vidas cotidianas. La decepción mundial en torno al hidrógeno revela que, a pesar de todo el capital invertido y las esperanzas depositadas, su producción efectiva podría estar más allá de nuestro alcance.