Este lunes, el dólar en Chile cayó a $960, un descenso significativo que coincide con el aumento en el precio del cobre, que ha alcanzado máximos no vistos en casi nueve meses. Este fenómeno se debe a las restricciones de oferta y un creciente apetito global por las materias primas, que superan los efectos de los aranceles impuestos por Estados Unidos.

La moneda estadounidense bajó $3,07, cerrando el mercado cambiario chileno a $962,75, el precio más bajo desde el 7 de noviembre. Este desplome se produce tras una caída de aproximadamente $17 en la semana anterior, según las pantallas de Bloomberg.

Los futuros del cobre en la Bolsa de Metales Comex se están recuperando, escalando más de un 2,6% hasta alcanzar los US$ 4,71 por libra, el nivel más alto desde finales de mayo de 2024. A pesar de que el índice del dólar subió un 0,2% hasta los 108,23 puntos, el avance del cobre ha sido innegable.

Juan Ignacio Guzmán, CEO de GEM Mining Consulting, destacó que el ascenso del cobre es parte de un movimiento más amplio de los commodities, impulsado por las condiciones macroeconómicas que le han dado un respiro al dólar global. También mencionó que los inventarios de cobre en la Bolsa de Metales de Londres han disminuido durante seis semanas consecutivas, evidenciando un desajuste entre oferta y demanda. "La oferta no está cubriendo la demanda actual", afirmó Guzmán.

Esta creciente tensión en el mercado del cobre se alimenta de la expectativa de interrupciones en el suministro proveniente de Chile. Guzmán subrayó que ciertos planes de producción, como los de Collahuasi, están apuntando a niveles significativamente más bajos. Además, algunas operaciones de Codelco podrían enfrentar retrasos o no cumplir con las proyecciones iniciales.

A esto se le suma un entorno de demanda optimista: se reportó que el IPC de China aumentó un 0,5% interanual en enero, una cifra que sobrepasó las expectativas y que refleja un aumento en el gasto previsto para el Año Nuevo Lunar. Ignacio Mieres, analista de XTB Latam, menciona: "Esto mejora las perspectivas sobre la recuperación de la demanda, manteniendo los precios del cobre elevados, lo que es benéfico para la moneda chilena".

En medio de este escenario, la guerra comercial sigue siendo un tema candente. Trump planea implementar un arancel del 25% a todas las importaciones de acero y aluminio, mientras que las repercusiones de las represalias chinas ya están en marcha. Los analistas de Saxo Bank advierten que estos movimientos pueden ser tácticas de negociación o un cambio estructural en la política comercial.

Mientras tanto, se anticipan noticias importantes. El presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, testificará en el Congreso estadounidense, un evento que puede influir en los mercados globales dada la próxima publicación del IPC de enero en EE. UU. Los expertos sugieren que una lectura moderada podría complicar la narrativa de desinflación que algunos esperan. Es dudoso que los inversores quieran reducir su exposición al dólar en este contexto, pudiendo ver al índice del dólar acercándose a un rango entre 108 y 109 puntos a inicios de esta semana.

Este panorama dinámico y lleno de incertidumbres acentuará el interés en cómo los cambios en la producción chilena y el comportamiento del cobre definirán la economía local en los próximos meses.