El uso de cajeros automáticos es cada vez más común, pero la precaución es fundamental para evitar fraudes y asegurar tus transacciones.

Con el aumento de los ciberdelincuentes, proteger nuestros datos personales y financieros se ha vuelto imprescindible. Estos criminales están siempre a la caza de nuevas víctimas, utilizando diversas estrategias para obtener información que pueden utilizar en su beneficio. ¿Sabías que operan desde la sombra? Se infiltran en aplicaciones de mensajería, llamadas telefónicas e incluso en tiendas online, convirtiendo la tecnología en su aliada para cometer delitos.

Sin embargo, no solo debemos preocuparnos por las estafas digitales. Los cajeros automáticos se han convertido en blancos fáciles para los delincuentes, por lo que hoy te revelaremos un consejo importante: hay un botón que siempre debes presionar al realizar transacciones en un cajero.

El botón crucial que jamás debes olvidar

La opción de “Cancelar” en el cajero automático es tu mejor aliada. Esta acción es esencial, ya que evita que tu información personal quede expuesta. Si no cancelas la sesión, podrías dejarla abierta, permitiendo que extraños accedan a datos delicados, como tu saldo de cuenta o recibos de transacciones. ¡No te arriesgues!

Los cajeros automáticos son vulnerables, y si te alejas sin cancelar, otra persona puede aprovechar esa oportunidad y cometer fraude en tu nombre. La seguridad comienza contigo y con esta simple acción.

Además, al finalizar una transacción, es común que las personas se distraigan o sientan prisa por irse. Presionar "Cancelar" no solo asegura que el cajero devuelva tu tarjeta, dinero y recibo, sino que también evita que alguien más se lleve tus pertenencias por error.

Asombrosamente, un gesto tan sencillo como presionar este botón puede marcar la diferencia entre una transacción segura y convertirte en víctima de un fraude. Te protegerá y cerrará tu sesión, asegurando que tus datos no queden accesibles para otros.

Consejos imprescindibles para evitar fraudes al retirar dinero

Antes de usar un cajero automático, revisa que esté en buen estado y que no tenga dispositivos sospechosos instalados. Los delincuentes pueden camuflar lectores de tarjetas o cámaras ocultas, ¡así que mantén los ojos bien abiertos!

Cuando ingreses tu PIN, cubre el teclado con la otra mano para que no pueda ser visto, ya sea por cámaras o personas cercanas. La prevención es clave. No olvides verificar los detalles de la transacción, como el monto, antes de confirmar, ya que algunas estafas modifican la pantalla del cajero, mostrando cifras incorrectas o cargos adicionales.

Recuerda recoger inmediatamente tu dinero, tarjeta y recibo. Un descuido puede costarte caro porque alguien podría acercarse en el momento justo para apoderarse de tus pertenencias.

Finalmente, al ser consciente y seguir estas recomendaciones, estás dando pasos importantes para protegerte contra el creciente número de fraudes que amenazan nuestra seguridad financiera. ¡Infórmate y mantente alerta!