Salud

¿Cuáles son los barrios más vulnerables de Las Palmas de Gran Canaria en salud y bienestar?

2025-04-07

Autor: Benjamín

La salud no es uniforme, y su diagnóstico en Las Palmas de Gran Canaria ha revelado resultados alarmantes. Un reciente estudio ha identificado que 33 de los 122 barrios analizados presentan índices preocupantes de vulnerabilidad. Esto se debe no solo a la alta mortalidad por enfermedades prevenibles, sino también a factores sociales significativos como el envejecimiento, que afecta a muchas comunidades.

El análisis fue presentado por la alcaldesa en un acto con motivo del Día Mundial de la Salud y en colaboración con la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria (ULPGC). Esta investigación, que se fundamenta en 45 indicadores, tiene como objetivo implementar políticas públicas que mejoren la calidad de vida de los ciudadanos. La alcaldesa, participando en este informe, destacó la necesidad de un Plan Municipal de Salud Pública centrado en abordar temas críticos como la creciente obesidad infantil.

Los datos son inquietantes: 24 de los 33 barrios vulnerables son clasificados por sobremortalidad evitable que incluye enfermedades graves como enfermedades cardiacas y cáncer. Las Rehoyas se destaca como el barrio más afectado en términos de salud, presentando cifras alarmantes en suicidios y enfermedades crónicas. Otros barrios como Vega de San José y Lomo Blanco siguen de cerca en esta lista, mientras que Jinámar, aunque no calificado entre los peores, muestra un alarmante incremento de muertes por diabetes en hombres.

Es importante mencionar que la desigualdad económica entre los vecinos de Las Palmas es superior a la media regional y nacional, siendo Santa Catalina y La Calzada los barrios con mayor disparidad. En lo que respecta a las condiciones de vivienda, Las Rehoyas figura nuevamente como una de las áreas más desfavorecidas, sufriendo de viviendas pequeñas y en mal estado.

La pobreza también resulta ser un gran desafío; en barrios como Jinámar y San Nicolás, más del 40% de los residentes enfrentan pobreza severa, mientras que en áreas más favorecidas como La Minilla esta cifra se reduce a menos del 10%. Además, la problemática del envejecimiento se intensifica en barrios como Tafira Baja y Monteluz.

La investigación fue realizada por el grupo Ecosalud de la ULPGC y su principal investigadora mencionó la importancia de adaptar las medidas propuestas a las necesidades específicas de cada barrio. La alcaldesa, al dar a conocer este informe, aseguró que proporcionará la base para desarrollar políticas efectivas que aborden los problemas de salud y bienestar en la ciudad, enfatizando en programas de educación alimentaria y la creación de más espacios verdes.

La situación es crítica y requiere atención inmediata: ¿Podrán las autoridades de Las Palmas implementar los cambios necesarios para mejorar la salud de sus ciudadanos?